coronaria con el corazón latiendo, creada por el doctor Ignacio Fajardo Egozcue, vicedirector de Docencia e Investigaciones del Cardiocentro en Villa Clara. Foto: César A. Rodríguez
El sector de la Salud en Villa Clara estuvo bien representado en la Exposición Aniversario 40 de la Anir con los aportes desarrollados por especialistas del Cardiocentro Ernesto Che Guevara, en la ciudad de Santa Clara.
Entre los trabajos relevantes figura la utilización de una técnica anestésica para realizar la cirugía coronaria con el corazón latiendo, creada por el doctor Ignacio Fajardo Egozcue, vicedirector de Docencia e Investigaciones, y en la que además participaron cardiólogos, intensivistas, anestesiólogos y otros especialistas.
Como antecedentes, el galeno señaló que en años anteriores en el referido hospital villaclareño se introdujo la cirugía de revascularización de las arterias coronarias obstruidas, procedimiento que requería detener el corazón y conectarlo a una máquina de circulación extracorpórea.
“Nos dimos a la tarea de profundizar en el tema. Hicimos un trabajo colectivo con la colaboración de cirujanos cubanos y la presencia de profesores extranjeros y así logramos desarrollar un nuevo método anestésico sin detener el corazón que a su vez permitía la rápida recuperación posoperatoria del paciente.
“Eso creó una revolución por su repercusión dentro de la práctica anestesiológica y lo extendimos a otros lugares del país, fundamentalmente en Santiago de Cuba”, afirmó.
No son pocos los beneficios de la nueva técnica merecedora del Premio Nacional de la Expo Anir 2005 y que, al decir de Fajardo Egozcue, la han recibido unas 800 personas y se emplea sistemáticamente en el centro villaclareño del cual es fundador, aunque todavía hay casos que requieren del procedimiento convencional.
Como principales ventajas señaló la reducción del consumo de Fentanilo en más de un 80 % de la dosis promedio empleada anteriormente, una pronta recuperación anestésica, lo que permite la extubación precoz en las primeras tres horas de operado, aminora el tiempo de ventilación posoperatoria, contribuye de manera directa a acortar la estadía promedio en las salas de cuidados intensivos posquirúrgicos a menos de 24 horas con incidencia en la disminución de los costos.
