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Meteoro 2016 en la realidad espirituana

En Sancti Spíritus y Trinidad fortalecieron el sistema de vigilancia antivectorial y la higienización de cada entorno. Foto: Manuel Pérez
En Sancti Spíritus y Trinidad fortalecieron el sistema de vigilancia antivectorial y la higienización de cada entorno. Foto: Manuel Pérez

 

Sancti Spíritus ha vivido el quinto año con más bajas precipitaciones registradas en su historia. En ese contexto, el Meteoro 2016 devino oportunidad para reforzar medidas ante realidades que hoy determinan el bienestar de los pobladores y el desarrollo económico del territorio.

El ejercicio popular demostró la capacidad de la provincia para enfrentar hechos como la actual afectación de 27 fuentes de abasto de agua, entre ellas la principal proveedora del polo turístico de Trinidad que está bombeando solo 5 litros por segundo del líquido. Estrategias para evitar las afectaciones a la población y a los recursos de la economía se solidificaron durante el Meteoro.

Higienización de afluentes, tragantes, calles, azoteas y eliminación de microvertedores también se concretaron en los diferentes municipios, con énfasis en Sancti Spíritus y Trinidad. Ambos territorios presentan altos índices de focalidad, sin embargo las acciones preventivas han contrarrestado los niveles de infestación.

Dado que aquí el 90 por ciento de los criaderos de mosquitos son detectados en los tanques bajos, este domingo realizaron prácticas de autofocales en los Consejos de Defensa, así como limpiezas del entorno. Meteoro 2016 devino plataforma para optimizar las condiciones territoriales ante sismos de gran intensidad, huracanes, sequías extremas y emergencias sanitarias.

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