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Tras su primera exposición personal, Revelaciones, Januar Valdés Barrios se confirmó cómo uno de los jóvenes artistas en ascenso, en una provincia cómo Pinar del Río, con varios premios nacionales de artes plásticas.
Egresado en la especialidad de grabado, no discrimina formatos y técnicas para crear un discurso propio y fecundo, con raíz evidentemente social, con la mirada atenta a los problemas cotidianos. Fotografía, dibujos, pintura y fragmentos de poemas le sirven para articular su poética y dar salida a sus inquietudes.
“Januar recrea sus tribulaciones sobre los mecanismos actuales de comunicación y los estados humanos frente a tales, desde tres aristas básicamente: el carácter moldeable de la naturaleza humana, la seducción de los modos de operación y los desconciertos por el apabullamiento de la incomprensión frente al descomunal flujo de información”, afirmó la especialista Yania Collazo González, del Centro Provincial de las Artes Visuales.
Coméntanos de tu primera exposición personal, Revelaciones
El proceso de preparación comenzó en 2010 y duró varios años. Lo que une a estas piezas variadas son aquellas preocupaciones que tengo como artista, como son las temáticas sociales. Fue bastante atípica porque mezclé varias técnicas- grabado, dibujos, pintura sobre lienzo, fotografía- según la que quería decir en cada una de ellas.
En las últimas tenía piezas que mezclaban el texto con la imagen, porque utilicé frases, poesías, que se relacionan con las cuestiones políticas, sociales. Voy mezclando para crear otra cosa, para hacer metáforas.
¿Por qué esta mezcla de recursos?
Desde que me gradué estoy buscando maneras de hacer y eso te lleva a experimentar con los soportes y las distintas técnicas. Soy graduado de la Escuela de Artes Plásticas en la especialidad de grabado, pero también empiezo a hacer pintura en esa época de estudios.
Ahora uno esos conocimientos a la fotografía, que he hecho en estos últimos años de una manera también experimental y es un medio más para expresar las ideas. Si quieres decir algo lo interesante es experimentar con estos soportes. No importa cuál sea, si sea lienzo o madera, porque el resultado final es lo importante, sin descuidar la factura, la parte estética.
¿A qué se deben las temáticas que tratas?
Primero que todo soy un joven, vivo en Cuba y la realidad no me es ajena. La vida personal influye en mi obra; las preocupaciones del día a día; la economía; la pérdida de valores; el contexto social y político. Somos como esponjas porque absorbemos las cosas y las plasmamos en la obra.
Soy creador pero no me diferencio de una persona común. No me puedo parecer a un artista europeo, porque los contextos y las maneras de pensar son distintas.
Alguna influencia directa
Cuando uno empieza siempre tiene influencia de los antecesores, no solo de los profesores sino también de los propios colegas. Fueron seis cinco o seis años en la academia y en ese tiempo se aprende. Es un proceso de retroalimentación porque tengo la historia del arte detrás de mí.
Hoy en día no hay nada nuevo en las artes plásticas y como todo está inventado, hay que aprovechar lo que existe. Prefiero fotografía, pintura y grabado, pero vamos creciendo poco a poco. Por eso he hecho también instalación, dibujos, carteles y escenografía para teatro. Además, ilustración para niños en la revista Chinchila, de la editorial Cauce. Todo de aporta algo.
¿Qué te ha permitido tus estudios de grabado?
Salí en 2006 de la Escuela de Artes Platicas, después de tres años estudiando grabado. En la carrera se estudian todos los procesos del grabado, pero depende después de los materiales, que a veces son escasos. No obstante, te da la posibilidad de experimentar mucho con cartón, madera, plástico, tela; con todo lo que te permitir hacer una obra impresa.
¿Cómo se encuentra el arte joven en la provincia?
Pinar del Río es una de las provincias con un buen movimiento en el país. De aquí han salido premios nacionales de artes plásticas como Pedro Pablo Oliva, Arturo Montoto y muchos otros artistas desde que se gestó la Escuela de Artes Plásticas.
En estos momentos, hay bastantes jóvenes que hacen una obra interesante, cuestionadora, pero pasa a veces pasa, en las artes plásticas, que trabajan muy dispersos, solos en su taller. Únicamente cuando la obra está en la galería todos confluyen.
