Plástico y circunstancia: Las variopintas motivaciones de la cirugía actual   

Plástico y circunstancia: Las variopintas motivaciones de la cirugía actual   

1 Estrella2 Estrellas3 Estrellas4 Estrellas5 Estrellas (Sin valoración)
Cargando...
Justin Jedicla, el Ken humano
Justin Jedicla, el Ken humano

Es un neoyorquino de 34 años. Justin Jedicla cede su cuerpo a la cirugía plástica, en efecto, como un maniquí. En él hay una suma de 191 operaciones. La tinta que ha discurrido sobre el joven nacido en Eslovaquia hace declaraciones un tanto impresionantes. Por lecturas no prolijas, sabemos que Jedicla creyó que arrojaba su vida por el caño si no lograba parecido con el muñeco Ken, la pareja de Barbie, e invirtió una cifra estrepitosa de cientos de miles de dólares en transformarse gluteos, nariz, pómulos, labios, brazos, músculos pectorales y abdomen.

Después sabemos que Jedicla hizo declaraciones patéticas de que había conseguido el cuerpo perfecto. Y algo nos corroe a poco.

Después sabemos que Jedicla volvió a acudir al quirófano, llevando consigo cuatro implantes que diseñó el propio neoyorquino para su espalda. Y que sugerirían la presencia de alas. Para aquellas fechas, ya se había autodeclarado modelo.

Después sabemos que Jedicla no se nos parece ni a una reminiscencia de Ken, sino a una aberración cosmética, una falta errante de ética médica, cuando caemos en la cuenta de que el esloveno en verdad no se nos parece a nadie, pero que es idéntico a cualquiera.

***

Valeria Lukyanova, de Ucrania.
Valeria Lukyanova, de Ucrania.

Valeria Lukyanova corrió con mejor suerte. En este caso la Barbie humana no deforma la imagen de Mattel. Lukyanova, una modelo ucraniana que frisa los 25 de edad, sometió su cuerpo a ostentosas alteraciones quirúrgicas de modo que ahora se pone en dudas si las fotos que la chica comparte en las redes sociales son reales o no son más que el laudable ejercicio de retoques y de trucajes.

Entre lo visible, la ucraniana muestra una cintura que ha ceñido hasta los 50 centímetros, un abdomen plano, un busto medio desproporcionado y un rostro de juguete. Valeria se maquilla y obtiene un débil rubor en su rostro de alabastro; cuelga imágenes suyas en la Internet y, por ende, la vemos en pantalones cortos, disfrutando al sol en bikini, en ropa interior o pasando el invierno con abrigos blancos. A cambio, Valeria recibe más de 600 mil Me gusta en una página de Facebook y se convierte en la persona más buscada en Internet en Rusia.

Y cuando Lukyanova comprende que no ha tenido suficiente hace declaraciones rimbombantes como que es seguidora del bretarianismo, un culto que marcha a la defensa de que es posible subsistir valiéndonos solo de la energía microcósmica (Uno de sus practicantes de renombre es el yogui indio Prahlad Jani, quien dice haber pasado los últimos 74 años de sus 82 sin comer ni beber).

La ucraniana afirma que se comunica a través de la luz. Además dice que procede de otro planeta en la constelación de las Pléyades y que tiene por capacidad la de viajar en el tiempo.

La inconforme de Lukyanova produce otro chasquido y de acuerdo con abc escribe en las redes sociales que «el aumento de la cirugía plástica está motivado por la existencia de parejas interraciales» y que «preferiría morir torturada a tener hijos»; el mismo medio publica una galería de selfies de Valeria sin maquillaje, apreciando que luce extremadamente delgada.

***

Veintidós años. Ojos amplios y acuosos, pestañas largas, labios reducidos, rostro con el contorno de diamante. Anastasiya Shpagina, otra ucraniana que lleva el cabello por lo común de púrpura o de rojo intenso, fue al quirófano y por las señas de la estética anime, pidió que la transformaran.

Anastasiya Shpagina, conocida como Fukkacumi.
Anastasiya Shpagina, conocida como Fukkacumi.

Anastasiya, quien se hace llamar Fukkacumi, invierte más de una hora diaria en ataviarse los ojos. En Youtube los usuarios han reproducido cientos de miles de veces un video en el que la ucraniana se aplica maquillaje para ganar semejanzas con un hada del bosque.

Dada su constancia, Fukkacumi después de extraerse unas costillas, pierde los kilos que desgajan los paralelismos con sus personajes nipones. En ciertas ocasiones el alter ego de la ucraniana ha dicho que recurrirá a una cirugía ocular para trocarse todavía más en anime.

***

Desde tiempos inmemoriales, las modificaciones en el cuerpo han estado al alcance de las personas. Unas veces más, unas veces menos. Aciertos y fallos. Ahorros y cuentas bancarias que se deslizan sin muchos cuidados. Porque no se escapan iguales saldos en ajustadores con relleno que en hincharse los senos y afirmarlos, o en allanar el vientre.

La fiebre de quirófanos que se ha desatado en estas épocas no es una hendidura del azar  en el sujeto moderno. Si vamos por un recuento, tanto Rodrigo Alves de Londres que al igual que Jedicla se convirtió en muñeco Ken, como el estadounidense Dennis Avner, el hombre gato o stalking cat, que murió con 54 años en Las Vegas, son el mismo resultado de la falsa libertad que nos venden: Sé todo lo que quieras ser. Aunque la transformación de Dennis Avner — tatuaje extensivo incluyendo facial, implante intradérmico para el uso de bigotes felinos, afilado y esmerilado de piezas dentales, orejas punteadas—siga siendo por demás funambulesca. Ergo, conviene repetirnos la frase inmarcesible de Publio Terencio Africano: Homo sum; nihil humani a me alienum puto (Soy hombre, a ningún otro hombre estimo extraño).

Compartir...

6 comentarios en Plástico y circunstancia: Las variopintas motivaciones de la cirugía actual   

  1. el mundo esta lleno de lo0cos esto es un ejemplo de esas personas que no tienen en que entretenerse y se atreven a someterse a cirugias peligrosas, las barbies humanas estan bien raras, no tienen belleza alguna

  2. Para mi esto es cosa de gente que no tiene algo más útil que hacer, y que deberian someterse a una evaluación siquiatrica urgente y lo comparo con lo que hizo Michael Jackson con su cuerpo que al final murio producto de todos estos inventos diabolicos.

  3. realmente creo que esto de las transformaciones humanas a ciertos personajes es una fiebre que esta acabando con la mente de las personas en el mundo, por dios esto es cosa del diablo, los esta usando, utilizandolos, se ha apoderado, el unico Ken humano que si era igualito era el joven brazileño que murio de cancer el mes pasado, ahora no recuerdo el nombre pero esto va en contra de la salud mental y fisica de los jovenes.

Escribir comentario

© 2018 Trabajadores. Órgano de la Central de Trabajadores de Cuba
Director: Alberto Núñez Betancourt
Subdirectores Editoriales: Alina Martínez Triay y Joel García León
Territorial y General Suárez. Plaza de la Revolución. La Habana, Cuba. CP: 10698
Fax: 053 (7) 555927 E-mail: digital@trabajadores.cu