El silencio fue absoluto cuando habló la doctora Melba Rosa Turro Osorio. Con voz serena y emotiva acaparó la atención, y conmovió los corazones, de las participantes en el Encuentro Nacional de Mujeres Trabajadoras, efectuado este viernes en la sede de la Central de Trabajadores de Cuba (CTC) como parte de las actividades del movimiento sindical en ocasión del 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer.
Ella formó parte de los colaboradores cubanos que combatieron la epidemia del ébola en Sierra Leona, donde voluntariamente prestó sus servicios como ginecobstetra. “Allí estábamos nosotras, 11 valerosas cubanas, en momentos muy duros, difíciles enfrentando el dolor y la muerte en las salas de parto y de neonatología de un hospital.
“Nos enviaron todos los medios de protección para estar más seguras y confiadas y permanecimos por siete meses. Cuando al país llegó la brigada médica de 165 médicos y enfermeros ya nos sentíamos muy agotadas”, expresó, pero en su pensamiento permanecía una idea: “No dejar morir a los niños, no dejar morir a las mujeres».
“Dentro de pocos días viajo de nuevo a otro país para cumplir una misión. Yo seguiré haciendo patria y me siento orgullosa por eso”, subrayó.
También intervinieron otras mujeres, entre ellas la general de brigada y Heroína de la República de Cuba Delsa Esther Puebla Viltre (Teté), quien a la edad de 16 años se incorporó a la lucha guerrillera en las filas del Ejército Rebelde, en la Sierra Maestra, en julio de 1957, a las órdenes del Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz.
Recordó anécdotas como integrante del pelotón Las Marianas, con el que participó en numerosas misiones y acciones combativas. Narró pasajes acerca de las difíciles condiciones de vida en aquel entonces y de los prejuicios que tuvieron que vencer ella y sus compañeras de armas ante el recelo de algunos hombres de la guerrilla. Por el coraje y el estoicismo demostrados merecieron toda la confianza de Fidel.
Una amplia representación de trabajadoras, dirigentes sindicales, deportistas e intelectuales se dieron cita en este Encuentro. Ernesto Freire Casañas, jefe de departamento de la CTC, dijo en la apertura que sin la creatividad y la inteligencia de la mujer cubana como sostén familiar y de la sociedad, nuestro país no hubiera podido resistir el embate de tantos años de injusto bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por el Gobierno de Estados Unidos.
Gisela Duarte y Teresa Hernández, integrantes del Secretariado de la CTC y la Federación de Mujeres Cubanas (FMC),respectivamente, ofrecieron una panorámica acerca de la participación de las féminas cubanas en diversas esferas de la vida económica, política y social del país.
Como parte del homenaje fue entregado el Sello Aniversario 75 de la CTC a Lizette Vila, asesora musical, documentalista de cine, televisión y video; Yipsi Moreno (campeona centroamericana, panamericana y mundial, y subcampeona olímpica en el lanzamiento del martillo) y a la general de brigada Delsa Esther Puebla.
