La pobreza es fruto de inequidad, no de falta de recursos, dijo el presidente de Ecuador, Rafael Correa, ante los jefes de Estado y Gobiernos reunidos en Costa Rica para participar de la III Cumbre de la Celac. Esa distribución desigual de la riqueza es “fruto de las relaciones de poder en donde pocos dominan todo”, aseguró.
Para el recién estrenado presidente pro témpore de la Celac, la pobreza es el resultado de perversas formas de distribución en una región, que por sus recursos, tendría 11 mil dólares per cápita, pero que actualmente tiene 67 millones de hambrientos.
Además de la lucha contra la pobreza, la presidencia ecuatoriana de la Celac propuso además, concentrar sus esfuerzos en implementar un nuevo mecanismo de medición de los derechos humanos, acorde con las expectativas propias de los habitantes de los pueblos de América; diseñar políticas que posibiliten el acceso general a una educación de calidad; definir una agenda regional climática; disminuir las brechas que en materia de infraestructura se expresan en el área; implementar una red de financiamiento y desarrollar estrategias de cooperación en el próximo quinquenio.
