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Los integrantes de la comisión de niñez, la juventud y la igualdad de derecho de la mujer del Parlamento cubano transmitieron este martes un mensaje de reconocimiento a los educadores cubanos, en particular a aquellos que prestan servicios en la escuelas para niños con trastornos de conducta y en los hogares de niños sin amparo familiar, en ocasión de celebrarse la jornada del Educador, a concluye este 22 de diciembre.
El desvelo y dedicación de los maestros que actúan en esos centros, así como la nobleza y el sentido de justicia humanista que ha demostrado Cuba en la formación y preparación de los niños, adolescentes y jóvenes que ahí se educan, fue resaltada por Yoerky Sánchez Cuellar, vicepresidente de la Comisión, al presentar el informe sobre la visita de control y fiscalización realizada a varias escuelas de ese tipo en diferentes municipios del país.
En la indagación, dijo, se constató que el consejo de escuela y las escuelas de padres funcionan con una frecuencia mensual y tratan temas afines con las problemáticas de los niños y las familias. También se comprobó la realización de festivales con diferentes manifestaciones artísticas, eventos deportivos, la utilización de parques y áreas aledañas, con la cooperación de las organizaciones de masas.
Expresó que los centros cuentan con mecanismos que permiten la atención de estos menores y la retroalimentación en cuanto a la evaluación de su conducta y desarrollo integral. En intercambio con estudiantes pudieron apreciar que existe un sistema evaluativo diario, favorable trabajo educativo de los docentes, lo cual potencia la autocrítica y fomenta valores.
Entre los asuntos a resolver señalaron la problemática del transporte, lo cual limita el funcionamiento de estos centros, en particular la labor de la guardia ante determinada situación. Otra de las cuestiones planteadas es el trabajo de los instructores de arte y en torno a ello recabaron la posibilidad de que estén ahí de forma permanente.
Acerca de los hogares de niños sin amparo familiar, se reconoció que el estado constructivo es adecuado, así como el vínculo de estos centros con las organizaciones políticas y de masas.
Varios diputados intervinieron en relación con el informe, entre ellos, Rosmery Santiesteban, de la provincia de Granma, quien expuso la necesidad de revisar el estipendio que se les entrega a esos niños, teniendo en cuenta los precios de los productos en la actualidad.
En ese sentido estuvo dirigida la reflexión de Liaena Hernández, de Guantánamo, quien expuso la necesidad de actualizar el Decreto Ley 74 que rectorea el funcionamiento de estos centros. También llamó a realizar un diagnóstico temprano de los niños que van a las escuelas con trastornos de conducta.
Al intervenir, Irene Rivero, viceministra del Ministerio de Educación, agradeció el reconocimiento trasmitido a los educadores de esas instituciones, que trabajan todo el año, porque “esos son sus niños” e incluso si están enfermos en un hospital van y los cuidan.
La directiva dio una amplia explicación sobre la situación de estos centros y señaló que el Ministerio trabaja en la propuesta de un nuevo estipendio, no sólo para los hogares y escuelas de conducta, si no también para otras que lo requieren.
La formación vocacional: una necesidad
En otro momento, los diputados de esta comisión, la cual preside Arelys Santana, recibieron una amplia información sobre las transformaciones introducidas por el Ministerio de Educación (Mined) acerca de la formación vocacional y calificación laboral.
La doctora Margarita McPherson Zayús, viceministra de Educación, se refirió a la situación que existe en los diferentes tipos de enseñanza en relación con la continuidad de estudios, así como de los vínculos escuela-comunidad.
Dijo que entre las causas para no continuar estudios está el hecho de que los estudiantes no aceptan las ofertas que se les hacen o están incorporados laboralmente. Mencionó que entre las especialidades más afectadas están la mecánica, la construcción y la agroindustrial, pues las muchachas no optan por ellas.
Manifestó que la continuidad de estudios depende del diagnóstico y la necesidad de cada territorio, y en relación con ello expresó que debe hacerse también con una mirada de género.
Agregó además que no siempre se planifica el trabajo socialmente útil, y no se logra que se correspondan los círculos de interés con las especialidades priorizadas de los territorios. Al análisis asistió Ena Elsa Velázquez Cobiella, ministra de Educación.
Acerca del autor
Graduada en Licenciatura en Periodismo en la Facultad de Filología, en la Universidad de La Habana en 1984. Edita la separata EconoMía y aborda además temas relacionados con la sociedad. Ha realizado Diplomados y Postgrados en el Instituto Internacional de Periodismo José Martí. En su blog Nieves.cu trata con regularidad asuntos vinculados a la familia y el medio ambiente.
