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El poder sanador del agua

Foto: René Pérez Massola
Foto: René Pérez Massola

Hace algunos años estamos escuchando el término hidroterapia, que no es más que la rama de la hidrología  que estudia la aplicación externa del agua sobre el cuerpo humano con fines terapéuticos, según define la licenciada Nydia A. Espinet Vázquez, en su artículo Terapia con agua publicado recientemente en la revista Voluntad Hidráulica del Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos.

Espinet Vázquez nos acerca con su trabajo a esta interesante terapia. Relata que aunque desde mediados del siglo XIV algunos médicos en Europa habían comenzado a utilizarla como forma de curación para diferentes males, hay documentos que demuestran que este método ya había sido empleado en el antiguo Egipto, China  antigua y en el imperio Romano.

Hasta el destacado filósofo Hipócrates  (460 a 337 a.n.e) se refirió a ella mediante técnicas como los baños de asiento, las sabanas húmedas, los baños turcos y de tina con plantas aromáticas, agua y lodo.

“Por sus propiedades, el agua  es un medio ideal para dar calor o frío al cuerpo y crear presión o eliminar resistencias sobre algunas  áreas por su efecto de empuje”, explica Espinet Vázquez.

En Japón actualmente es popular  beber agua inmediatamente al levantarse y como medio de curación. Consideran que es un medio efectivo y natural  para sanar de diversos padecimientos como artritis, dolores de cabeza, taquicardia, sobrepeso, asma, enfermedades urinarias, desordenes menstruales, diabetes, etc, siempre que “se tome adecuadamente , de manera continua, controlando el tiempo requerido y en el momento indicado”, apunta.

La licenciada además ofrece unas pequeñas claves para los que deseen probar la terapia japonesa y aquí las compartimos:

-Al levantarse en la mañana, y antes de lavarse los dientes, beba 4 vasos de agua, de aproximadamente 5.5 onzas cada uno. Puede comenzarse por un vaso y aumentar gradualmente hasta llegar a 4.

-Aséese y lávese la boca pero no coma o beba nada por un periodo de 45 minutos.

-Después de desayunar, almorzar o cenar no se debe comer o beber nada durante 2 horas.

– Para controlar, reducir o curar algunas enfermedades debe tomar el agua disciplinadamente por un número de días específico, veamos:

Probemos esta interesante terapia para sanarnos con el vital líquido. Aquí tenemos otra buena razón para ahorrar el agua, ¿no creen?

(Con información de artículo Terapia con agua, revista Voluntad Hidráulica del Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos, publicado en Junio de 2014)

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