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Imprescindible impasse en la producción de yogur de soya

Todos los trabajadores del yogur participan en la reparación. En la foto, los mecánicos acometen labores en las líneas de llenado de bolsas Foto: Agustín Borrego
Todos los trabajadores del yogur participan en la reparación. En la foto, los mecánicos acometen labores en las líneas de llenado de bolsas
Foto: Agustín Borrego

Labores impostergables de mantenimiento y reparación, así como de higienización de las plantas dedicadas a la producción de yogur de soya en el Complejo Lácteo de La Habana, hacen que durante el mes de septiembre los niños de la capital y de la provincia de Mayabeque no reciban ese importante alimento y sí la llamada mezcla para batidos, también con alto nivel nutricional.

Aunque no se trata de una parada planificada, la falta de mantenimiento y reparación en los últimos años obligó a detener la fabricación desde el pasado lunes y hasta fines de mes, para tareas imposibles de efectuar en otras circunstancias.

Sin dudas una decisión de alta sensibilidad, pues cada niño de ambas provincias recibe 12 bolsas cada mes, lo que ya se ha hecho tarea de honor para quienes tienen el encargo de fabricarlo.

El Complejo Lácteo tiene un plan anual de 32 mil toneladas de yogur de soya, de ellas unas 26 mil para los niños y la merienda escolar, empeño que desde hace varios años encierra alta tensión en su cumplimiento, dados, precisamente por la falta de financiamiento para la ejecución de las reparaciones y mantenimientos necesarios.

Alfredo Vázquez Romero, director técnico del Complejo, dijo que durante estos 30 días ejecutan la reparación de pisos y las máquinas de envase, mejoras tecnológicas a equipos de bombeo, pintura y otras acciones de higienización en sentido general, específicamente en paredes y techos, también muy afectados.

“Si no paralizábamos la producción, corríamos el riesgo de que se afectara la inocuidad del alimento, así como la garantía para poder fabricarlo en lo adelante. Hoy están detenidas las cuatro líneas de llenado de bolsas ─una de ellas en El Aljibe, Mayabeque─ pero iniciaremos octubre fabricando yogur”, indicó.

Incluso, quedarán acciones para después del reinicio productivo, entre ellas, de vital importancia garantizar el futuro del yogur, la terminación de una nueva nevera de conservación, que opinan será de las más avanzadas del país.

“Paralelo a ello, también estamos levantando el piso en la nevera actual, un trabajo difícil, pero imprescindible, pues esa superficie está en muy mal estado y causa muchos dolores de cabeza para el trasiego del producto terminado”, dijo el jefe técnico de la entidad.

Julio René Valdés, director general del Complejo Lácteo, indicó que la citada mezcla de batido constituye un producto aún más costoso que el yogur, y subrayó que la sustitución no será para la merienda escolar, pues este mes los estudiantes continuarán consumiendo yogur, ahora procedente de Artemisa y Matanzas.

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