Este es un sábado especial en muchas barriadas cubanas, es un sábado de fiesta, de alegría, de convite por los 54 años que cumple este 23 de agosto la Federación de Mujeres Cubanas (FMC).
Por esos motivos se juntarán las vecinas en el más iluminado espacio de la calle: una traerá un té, la otra unos pastelitos, la de más allá un pudín, quizás alguien llegue con croquetas o refrescos, en realidad no importa mucho lo material sino más bien ese tiempo dedicado a la recordación y al sueño, a conversar de lo que ayer fue y hoy es la organización femenina cubana, la misma que revolucionó la vida de muchas mujeres.
Este sábado se torna ideal para que broten las anécdotas de aquellas que lograron estudiar o emplearse gracias a la gestión de la FMC, para rememoran los días de las grandes movilizaciones a la recogida de café o los cortes de caña, para agradecer una vez más la creación de los círculos infantiles, sitios de atención a hijos e hijas de trabajadoras.
Este 23 de agosto se perfila como día perfecto para reconocer los agigantados pasos de las mujeres en Cuba, protagonistas de la fragua y consolidación de la Revolución, y también para pensar en el mañana con la esperanza de que sean más los espacios conquistados y que sean menos las ataduras machistas que todavía existen hacia dentro y hacia fuera del hogar.
Recuerdos y esperanzas marcan al día de hoy, punto de partida para comenzar a planear otro festejo mayor ese que ya se anuncia tentador para el venidero agosto de 2015 cuando se cumplan los 55 años de la FMC.
