Icono del sitio Trabajadores

Representar y defender derechos

Jorge F Sarduy , delegado de Cienfuegos. Foto: Agustín Borrego Torres.
Jorge F Sarduy , delegado de Cienfuegos. Foto: Agustín Borrego Torres.

Jorge Sarduy habla del mismo modo en su vaquería -de la unidad básica de producción cooperativa (UBPC) El Tabloncito, en el municipio cienfueguero de Cumanayagua- que en la sala 4 del Palacio de las Convenciones, de La Habana, en la Comisión No. 3 de las sesiones finales del XX Congreso de la CTC: alto, claro y conciso.

“No hemos sido capaces de responder al apoyo financiero que dio el Gobierno para ‘salvar’ las UBPC. Muchas tienen deudas. ¿Hasta cuándo? Por otro lado, el pueblo necesita comer productos baratos. Por eso tenemos que producir más y para eso hay que trabajar con los hombres, conversar con ellos, saludarlos todos los días, preocuparnos por sus problemas y ayudar a resolverlos”, afirmó Sarduy, que también es secretario general de la sección sindical de su colectivo.

En esa cuerda estuvieron los análisis y consideraciones de esta comisión de trabajo, a partir de un motivador informe, presentado inicialmente por Gisela María Duarte Vázquez, integrante de la Comisión Organizadora de este XX Congreso de los trabajadores cubanos.

El documento refiera que el movimiento sindical, a partir de los cambios que se están operando en la economía y en el escenario laboral del país, tiene entre sus tareas priorizadas la atención a los trabajadores no estatales: representarlos y defender sus derechos frente al empleador.

Debido “a su tendencia al crecimiento, el carácter heterogéneo de su composición y la diversidad de modalidades resulta imprescindible organizar y sindicalizar este sector para que contribuya al desarrollo de actividades productivas y de servicio”, expresó Duarte.

Aunque varias normas jurídicas que regulan el trabajo por cuenta propia, han sido modificadas para dar respuesta a planteamientos reiterados de los trabajadores no estatales, aun existen asuntos pendientes.

“Relacionados con la necesidad de la creación de un mercado mayorista donde adquirir las materias primas y materiales que requieren para su labor; el mejoramiento de las condiciones de trabajo en las áreas de concentración y el acoso de inspectores”, refirió Duarte.

“Nuestras estructuras sindicales ─continuó— tienen que apoyar el enfrentamiento a las violaciones e ilegalidades como la evasión fiscal; examinar cómo desarrollar la negociación colectiva, asegurando que no se violen los derechos y deberes en los lugares donde existe trabajo subordinado”.

“Requiere especial seguimiento el desempeño que aporten las 270 cooperativas no agropecuarias y la transformación de la labor sindical en las UBPC, llamadas a contribuir significativamente a la soberanía alimentaria del país.

En estas nuevas condiciones hay que atemperar la realización y contenido de las asambleas de afiliados.

“El sindicato en nuestro socialismo tiene que perfeccionar y consolidar sus funciones y por tanto, exigirá de los trabajadores el cumplimiento de sus deberes laborales e influirá en su formación política, sindical y laboral, reclamando el respeto de sus derechos de trabajo, salariales, de seguridad social, de condiciones de trabajo, salud y seguridad; exigiendo porque no se produzcan excesos o abusos”, concluyó.

Compartir...
Salir de la versión móvil