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Estatales y no estatales en abrazo culinario

Chef del sector estatal (derecha) y del no estatal (izquierda) se unieron para compartir experiencias teóricas y prácticas. Foto: De la autora.

Chef del sector estatal (derecha) y del no estatal (izquierda) se unieron para compartir experiencias teóricas y prácticas. Foto: De la autora.

Chef del sector estatal (derecha) y del no estatal (izquierda) se unieron para compartir experiencias teóricas y prácticas. Foto: De la autora.
Chef del sector estatal (derecha) y del no estatal (izquierda) se unieron para compartir experiencias teóricas y prácticas. Foto: De la autora.

La defensa de la cocina cubana con base en la excelencia del servicio que se brinda a nacionales y extranjeros es un interés que comparten trabajadores estatales y no estatales de Santiago de Cuba vinculados a las ofertas gastronómicas en los restaurantes de este suroriental territorio.

Así quedó demostrado durante el desarrollo del Primer Festival Gastronómico del Turismo que por iniciativa de la delegación provincial del MINTUR, junto con la Federación de Asociaciones Culinarias de la República de Cuba (FACRC), unió a trabajadores de instalaciones turísticas y cuentapropistas, quienes abogaron por el rescate de lo mejor de la cocina nacional.

El modo de potenciar las ofertas de platos típicos y de dulces tradicionales, de desarrollar iniciativas que realcen las decoraciones, de explotar más la coctelería cubana, y de estimular la creatividad, fueron inquietudes compartidas por chef y directivos de restaurantes particulares y estatales.

La necesidad de mantener una constante capacitación y actualización del personal vinculado a estos servicios resultó tema recurrente, cuestión prioritaria para la FACRC según reconoció, Eddy Fernández Montes, su presidente.

“Nuestra organización no hace distinciones entre estatales y no estatales, apostamos por la calidad, por las buenas prácticas, por la ética en el desempeño sin miramientos del lugar donde se empleen los afiliados, bien sea en un paladar, una escuela, un hospital o un restaurante, y destinamos los cursos y entrenamientos a todos aquellos que estén interesados en superarse en el arte culinario.”

El Festival abrió espacios para conferencias, debates teóricos y acciones prácticas que contribuyeron a estrechar vínculos de trabajo e intercambio fraterno entre estatales y no estatales bajo el presupuesto de apostar y aportar por la excelencia y la distinción de la culinaria cubana.

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