Primeras Mipymes tuneras por personalidad jurídica propia

Al firmar ante notario público  Plásticos Bahamonde,  Cerrajería Cepwar, Mercazona, Durobras, Génesis,  y  Tú Hamburguesa, seis de las primeras Mipymes aprobadas en Las Tunas, dieron  un paso importante en el camino por alcanzar personalidad jurídica propia  que les crea condiciones para desarrollar a plenitud sus potencialidades.

Así lo establece el Decreto-ley 46, cuerpo legal que define a las  Mipymes como unidades económicas dotadas de personalidad jurídica, dimensiones y características propias,   creadas con el objetivo de  desarrollar la producción de bienes y la prestación de servicios que satisfagan necesidades de la sociedad.

De acuerdo con las regulaciones,  este acto legal  es el tercero de un total de seis que dan continuidad a la aprobación por el Ministerio de Economía y Planificación (MEP) de las solicitudes presentadas por los interesados en esta nueva forma de gestión y emprendimiento.

Aunque todavía están pendientes algunos trámites como su inclusión en el Registro Mercantil y la habilitación de la cuenta bancaria,  Joan Silva Sánchez, uno de los socios de Plásticos Bahamonde,  reconoce que de esta manera se hace firme   la aprobación dada por el Ministerio de Economía y Planificación.

Silva Sánchez agradeció a la Dirección de la Revolución la confianza depositada en el proyecto y ratificó la voluntad del colectivo de contribuir con sus esfuerzos al desarrollo del país como nuevos actores económicos que incursionan en producciones circulares que contribuyen, además, a la protección del medioambiente.

De acuerdo con lo previsto,  en el futuro inmediato  otras cinco mipymes del municipio de Las Tunas realizarán similar acción ante notaría, otras tres lo harán en Jesús Menéndez y dos en Puerto Padre.

Desde el pasado 29 de septiembre y hasta ese día (10 de noviembre), el MEP había  aprobado   16 solicitudes de emprendedores  tuneros que optan por esta novedosa  forma de organización empresarial que incluye  micro, pequeña y mediana empresas privadas o estatales y promueve encadenamientos productivos entre todos los actores y un mayor aprovechamiento de los recursos humanos formados por la Revolución.