Por el autoabastecimiento territorial

Salvador Valdés Mesa, vicepresidente de la República de Cuba, recorrió zonas de producción agropecuaria en el municipio de Consolación del Sur, provincia Pinar del Río, para constatar la marcha de la campaña de frío en el territorio.

En la finca El Mango, el campesino Armando Blanco Rodríguez, usufructuario de la cooperativa de créditos y servicios (CCS) Carlos Manuel de Céspedes le explicó que tuvo que preparar la tierra en tres ocasiones, porque en las dos primeras, perdió los semilleros como consecuencia de intensas lluvias, y hoy 22 de las 26 hectáreas que posee están sembradas.

Plantaciones de pimiento, calabaza, melón, maíz, plátano, frijol y tomate ocupan el área, las de los dos últimos cultivos comprometidas para la obtención de semillas. Espera a mediados de enero empezar a cosechar para tributar a los mercados agropecuarios y dar su aporte con el fin de reducir el déficit de ofertas.

Valdés Mesa se interesó por los métodos para combatir las plagas ante la carencia de medios químicos, las relaciones con Acopio, los pagos atrasados, las solicitudes de créditos al banco y el acompañamiento que ofrecen las autoridades de la Agricultura.

Joel Hernández Acosta director de la Empresa Integral de Tabaco de Consolación del Sur, señaló que como parte de la estrategia potencian a los productores cerca de la cabecera municipal, para reducir el gasto de combustibles en la transportación y que los tabacaleros que no participan en la zafra de la solanácea se sumaron a los cultivos varios.

El territorio debe plantar en la presente campaña de frío 4 mil 375 ha para lograr las 14 mil toneladas comprometidas con el autoabastecimiento local, de las cuales 4 mil están destinadas a la ciudad de Pinar del Río.

Julio César Rodríguez Pimentel, presidente del Consejo de Defensa Provincial (CDP) dijo que pese a los más de tres meses de atraso, esperan mejores resultados que en la etapa de primavera, marcada por un período de intensa sequía, mientras ahora fueron las intensas lluvias las que incidieron negativamente.

En la Unidad Genética Porcina El Tigre, también de Consolación del Sur, recibió información detallada acerca de los indicadores productivos de ese centro, que destaca a nivel de país por sus resultados y desde ella se garantizan los pies de crías a la región occidental de Cuba.

Víctor Fidel Hernández Pérez, delegado de la Agricultura en la provincia, explicó la estrategia del territorio para aumentar la masa porcina, especialmente con cerdos de la raza capa oscura, así como el empleo de variedades de yuca de alto rendimiento para obtener mayor cantidad de alimento animal en menor área.

El uso de la energía solar para el bombeo del agua en las cochiqueras, así como de los residuales para la obtención del biogás y las posibilidades de incrementar su explotación fueron temas en los que insistió el Vicepresidente, quien sostuvo un breve intercambio con los trabajadores de una de las estructuras donde atienden a más de 4 mil animales.

El diálogo que tuvo lugar a través de la cerca, en estricto cumplimiento de las normas de bioseguridad requeridas, versó sobre el tema del salario y el aprovechamiento de las tierras en función de producir alimento para la masa porcina, lo que reduciría los costos y por ende propiciaría más utilidades, además de tributar a la deseada independencia de las producciones nacionales de materias primas importadas. Valdés Mesa, indagó, además, sobre sus criterios con respecto a las medidas asociadas al ordenamiento monetario.

Concluyó el recorrido en la unidad empresarial de base (UEB) Fábrica La Conchita, Idalberto Rodríguez Herrera, director de la entidad le explicó del rol desempeñado por el movimiento de innovadores en el proceso de mantenimiento que ejecutaron, y le ofreció detalles sobre las inversiones que realizan.

A pesar de las limitaciones impuestas por la Covid-19, lograron por concepto de exportación en frontera 164 mil dólares y otros 32 mil en el mercado europeo, hacia el cual hay proyecciones de ampliar la presencia y ya están listas muestras comerciales con destino al mismo.

Se interesó por las condiciones de trabajo, los salarios y el impacto que tendrá sobre los mismos el ordenamiento monetario, llamó a garantizar la calidad de las producciones y su inocuidad.

La gran responsabilidad de los empresarios, resaltó, es administrar los recursos del Estado y la eficiencia de los procesos, que siempre que lo hagan tendrán resultados económicos favorables y servicios a la población.

Asimismo, apuntó que lo más importante es el cambio de mentalidad, pues no hay que esperar por las soluciones del país, sino gestarlas desde el municipio, porque cada territorio debe ser sostenible, lo cual tributa no sólo al autoabastecimiento y la soberanía alimentaria sino también a la independencia del país.