Machado Ventura evalúa aseguramientos en Holguín para la próxima zafra azucarera

Con la finalidad de precisar los aseguramientos para la zafra azucarera 2018-2019 en la provincia de Holguín, José Ramón Machado Ventura, segundo secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba (PCC), sostuvo este domingo un fructífero encuentro con directivos y trabajadores del sector en el oriental territorio, en el cual realizó un análisis profundo sobre las posibilidades objetivas para enfrentar la próxima contienda.

Machado Ventura evaluó las proyecciones de los cinco ingenios holguineros de cara a la venidera zafra, para la cual, resaltó, existen condiciones relativamente favorables, porque la provincia dispone de los volúmenes de caña necesarios, situación que exige poner el mayor esfuerzo en elevar el rendimiento industrial y obtener así resultados superiores a los de este año, cuando las condiciones climáticas desfavorecieron la producción de azúcar.

El dirigente partidista se interesó por conocer las perspectivas de los principales indicadores de eficiencia en las industrias y el balance de recursos para la cosecha y el transporte de caña. En ese punto insistió en que se debe, dentro de las posibilidades, explotar mejor los beneficios del ferrocarril, medio que es más rentable, y valorar la utilización de carretas remolcadas por tractores en áreas cercanas a los ingenios, lo cual garantizaría la estabilidad en el tiro de materia prima.

Explicó que, como la parte agrícola tiene una mejor situación en Holguín, se requiere perfeccionar la situación de las industrias, que tienen sus limitaciones. Por ello la estrategia para la venidera zafra incluirá bajar un poco los índices en la norma de molida de los ingenios, para que sufran menos roturas y puedan ser más estables en su funcionamiento.

En la jornada, en la que participó Luis Torres Iríbar, miembro del Comité Central y primer secretario del PCC en Holguín, Machado Ventura instó a preparar el terreno para incrementar la eficiencia en el rendimiento industrial, moler con estabilidad y sin pérdidas de tiempo, lo que debe revertirse en un incremento de los volúmenes de azúcar.