Cargando...“Mi Gobierno también ha impuesto duras sanciones a las dictaduras comunistas y socialistas de Cuba y Venezuela“, afirmó el presidente estadounidense Donald Trump, al tiempo que solicitó al Congreso de Estados Unidos (EE.UU.) mayores medidas unilaterales contra los países latinoamericanos.
En el contexto de su primer discurso sobre el Estado de la Unión, efectuado en la noche de este martes, Trump pidió más sanciones contra las “dictaduras comunistas” de Cuba y Venezuela, e insistió en la necesidad de construir un muro a lo largo de la frontera de EE.UU. con México, pues “cierra las lagunas explotadas por criminales y terroristas para ingresar” a su país.
Reconoció a China y a Rusia como principales rivales, a pesar de que ambos Gobiernos abogan por relaciones de respeto mutuo: “Enfrentamos a lo largo del mundo regímenes parias, grupos terroristas y rivales como China y Rusia que desafían nuestros intereses, nuestra economía y nuestros valores”, sostuvo.
En su discurso fue crítico y manipulador con los sucesos ocurridos a lo largo del año en Corea del Norte e Irán: “Cuando el pueblo de Irán se levanta contra los crímenes de su corrupta dictadura, no me quedé callado”, apuntó y pidió al Congreso que revise “las fallas fundamentales en el terrible acuerdo” de armas nucleares con Irán, suscrito con Obama.
Como si no bastara, firmó este martes una orden ejecutiva que ordena mantener abierta la cárcel de Estados Unidos en la base naval de ese país en Guantánamo, en el suroeste de Cuba.
Desde enero del 2002, la Casa Blanca mantiene allí reos acusados de terrorismo aunque la administración de Barack Obama consiguió trasladar a territorio continental unos 200. El centro fue blanco de numerosas críticas de organizaciones internacionales y activistas de derechos humanos por las torturas y vejaciones de que fueron objeto los reos.
La actual orden de Trump no especifica cuando la Administración comenzará a enviar de nuevos detenidos, aunque se espera que sea el destino de lo que el mandatario ha definido como “algunos chicos malos”’.
El documento emitido por Trump indica al secretario de Defensa, James Mattis, enviar recomendaciones a la Casa Blanca en un término de 90 días sobre la forma en que Estados Unidos manejará el asunto de los individuos capturados en conflictos armados, incluyendo la política de transferencia hacia la base de Guantánamo.
La decisión revierte la directiva del expresidente Barack Obama quien se propuso cerrar la prisión.
La cárcel de Guantánamo ocupa una porción de la base naval que Estados Unidos mantiene en el oriente cubano en contra de la voluntad del Gobierno y los habitantes de la isla caribeña. Luego de su apertura llegó a albergar hasta 800 reos de 44 países a un costo que supera los cinco mil millones de dólares, con un promedio de seis millones de dólares por cada prisionero al año. Actualmente quedan allí 41 reclusos, según información de Prensa Latina.
