Dar el voto por el pueblo, la Revolución y nuestro futuro

Dar el voto por el pueblo, la Revolución y nuestro futuro

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Al elegir al delegado estamos erigiendo los cimientos del gran edificio que es nuestro socialismo: mantengámoslos firmes y el edificio se mantendrá firme y eterno, sentenció el diputado Esteban Lazo Hernández, presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular, luego de ejercer su derecho al voto en la mañana de este domingo en las elecciones municipales.

Elecciones 2017- 2018.Colegio electoral presencia de estebán Lazo presidente de la asamblea Nacional.
26 de noviembre 2017.
Foto José Raúl Rodríguez Robleda

El también miembro del Buró Político del Partido Comunista de Cuba, equiparó los retos de los delegados de circunscripción que resulten electos con los del pueblo que representan y los del gobierno que ellos constituyen.

Entre esos objetivos particularizó en el cumplimiento a los acuerdos del VII Congreso del Partido, que incluyen la conceptualización del modelo económico y social, los lineamientos, así como el plan de desarrollo estratégico hasta el 2030,  cuyas bases ya fueron aprobadas y que “debe quedar elaborado para finales de este año”.

Lazo Hernández destacó que en esos documentos “está la labor que todos los cubanos tenemos que desarrollar para construir el socialismo que nos hemos propuesto, con un país soberano, independiente, democrático, socialista, próspero y sostenible”.

La votación de hoy es un momento de reafirmación para todos los cubanos, un derecho que todos tenemos y también un deber que todos debemos cumplir, valoró el presidente del Parlamento.

En sus declaraciones a la prensa, rememoró la participación junto a Fidel, Raúl y otros dirigentes en los inicios de la experiencia de los Poderes Populares en 1974 en la provincia de Matanzas, dos años antes de que se crearan en el resto del país.

Desde el principio Fidel planteó cuestiones que debían ser diferentes a cómo se hace en otras partes del mundo; en primer lugar, el Partido no postula; en segundo lugar, no habría propaganda, solo la biografía de quienes son propuestos; y tampoco habría dinero; un proceso verdaderamente desarrollado por el pueblo, principios que se han ido cumpliendo, explicó.

Abundó que por ese motivo el enemigo siempre ha criticado a Cuba por una supuesta falta de democracia. Es un gran error, dijo Lazo, quien recordó una frase de Fidel en marzo de 1993 ante el Parlamento, cuando expresó que en las elecciones cubanas “la postulación es millonariopartidista”, en referencia a que toda la ciudadanía tenía derecho a hacerlo.

La esencia fundamental de nuestro sistema electoral es que el pueblo postula y el pueblo elige, y es el pueblo el que en un momento determinado puede revocar a quien eligió, sintetizó.

El presidente de la Asamblea Nacional insistió en que cualquier persona puede ser electa para dirigir una circunscripción, “siempre y cuando tenga conocimiento, capacidad, valores y le sea fiel al pueblo y a la Revolución”.

“A quien le falte a alguna de estas cuestiones es difícil que pueda postularse, porque nuestro pueblo sabe, tiene una alta cultura política, y comprende bien que es lo que nos conviene para nuestro futuro, para poder defender todo lo que la Revolución ha hecho hasta ahora y lo que debemos y podemos hacer”, añadió.

El alto dirigente destacó también el muy especial momento en que transcurrieron estas elecciones, luego de arribar al primer aniversario de la desaparición física del Comandante en Jefe. “Y digo desaparición física, porque Fidel desde el punto de vista moral, humano, jamás desaparecerá de la memoria de ningún ciudadano, de ningún cubano, y nos estará dirigiendo siempre, porque fue capaz de sembrar la semilla de un árbol tan fuerte que no se derribará nunca, se seguirá renovando, pero jamás se le derribará”.

“Votar por el delegado es dar el voto por el pueblo, y dar el voto por el pueblo, es darlo por la Revolución, por nuestro futuro”, enfatizó.

También profundizó Lazo en las responsabilidades del delegado en el sistema político cubano, al reconocer su importante labor como representante del pueblo, y exhortar a acompañar su gestión con una mayor participación ciudadana.

En ese punto, explicó el principio de la rendición de cuentas “que muchas veces la confundimos, porque pensamos que la función del delegado está solo en si se resuelve o no un problema, y ahí cometemos un error grave, porque puede ser que en un momento determinado en algún lugar haya un problema que no lo puede solucionar el delegado, ni el municipio, la provincia o el país”.

Insistió al respecto en los problemas económicos existentes, en la condición de Cuba como país pobre y bloqueado durante años. “¿Cuánto podíamos haber hecho si no hubiéramos perdido los 125 mil millones de dólares que hemos perdido por el bloqueo?” reflexionó.

Esteban Lazo particularizó además en la juventud de muchas de las personas que hoy ostentan responsabilidades de dirección en el país, y en cómo el enemigo trata de utilizar eso, equivocadamente. “La fuerza principal que tiene esta Revolución siempre son los jóvenes”, sostuvo, al citar varios ejemplos de la participación juvenil a lo largo de la historia y en el presente.

Entre las tácticas para intentar desprestigiar a la Revolución, explicó cómo el enemigo también dice que el delegado no resuelve nada. “Sin embargo —refirió—, he oído decir que ha habido algunos de esos mercenarios que ahora querían ser delegados, ¿para qué quieren serlo, si dicen que no resuelve nada?”.

Informó que durante los cuatro procesos de rendición de cuenta de la legislatura que ahora concluye, los delegados, entre los despachos y los planteamientos en las asambleas, tramitaron dos millones 200 mil planteamientos de diferente índole. De ese total, hasta la semana pasada se había resuelto un millón 900 mil, alrededor de un 85,5 por ciento.

“Eso no es cualquier cosa”, indicó el presidente del Parlamento, quien enumeró varios de los mecanismos y sistemas de trabajo que se han usado para conseguir ese resultado, a través de los consejos populares, la contribución especial del 1% para el presupuesto municipal, el involucramiento de los ministerios y la inclusión de las propuestas de solución en el plan anual de la economía.

“Todo nuestro sistema tiene que ir dirigido a preocuparnos por resolver los problemas de la población de una forma u otra”, resumió Lazo, quien también fustigó las cosas mal hechas y a la gente que abusa o comete delitos.

Particularizó igualmente en la trascendencia de la asamblea de rendición de cuentas, la cual “no es la asamblea de los planteamientos”, sino el gobierno a ese nivel. “Quizás los problemas personales debían dilucidarse a través de los despachos, y las asambleas dedicarlas fundamentalmente a discutir los problemas del barrio, cómo participa el pueblo, qué le afecta”, sugirió.

El papel del delegado como miembro de las asambleas municipales que gestionan el plan de la economía, el presupuesto, el control a través de comisiones, en sus funciones de gobierno; así como su integración hasta un 50% de las asambleas provinciales y la Nacional, fueron aspectos que destacó Lazo.

“Este sistema se ha ido perfeccionando y se seguirá perfeccionando en el futuro”, aseguró.

Como parte de ese proceso insistió en la economía como una de las principales tareas del Poder Popular, en busca de fortalecerla, mediante la disminución de los gastos, el ahorro al máximo, el aumento de la producción para exportar y sustituir importaciones, así como eliminar las indisciplinas, las ilegalidades y la corrupción.

La participación de la población en la solución de los problemas sociales y el impulso al control popular, también mereció la atención del miembro del Buró Político, quien exhortó al pueblo a “tener la vista puesta en qué está pasando en el mundo” como guerras, terrorismo, el aumento de la miseria, la concentración del capital cada vez en menos manos, las acciones del enemigo contra los países progresistas, los golpes de estado a través de los parlamentos, y la política agresiva del nuevo presidente de los Estados Unidos contra Cuba.

“Fidel nos enseñó que nuestra principal fortaleza ante el enemigo era la valentía, la decisión de lucha y la unidad. Por eso tratan de desunirnos y sería un grave error que nosotros nos dejáramos desunir. El día que estemos desunidos empezamos a perder la batalla. El pueblo nuestro tiene que tener claridad en eso.

“En momentos como estos, de elecciones, hay que mandar un mensaje de unidad, de fortaleza y de la decisión que tiene todo nuestro pueblo de defender el socialismo, la Revolución y de serle eternamente fiel a Fidel, a Raúl y a todos los que dieron la vida por esta Revolución”, concluyó.

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