Cargando...Debemos esforzarnos más para acabar con las múltiples tragedias que desata el cáncer. Este es uno de los mensajes promovidos por la Organización Mundial de la Salud, en las jornadas previas al 4 de febrero, que se toma como día mundial de lucha contra este mal que causa millones de muertes cada año sin distinción de sexo, raza o edad.
el espacio y la comodidad, explicó el doctor Oscar Pérez.
Foto: Agustín Borrego Torres.
Según fuentes oficiales, alrededor de una tercera parte de los cánceres es prevenible, y otros pueden curarse con el diagnóstico y tratamiento tempranos. Incluso, cuando la enfermedad está en etapa avanzada, los pacientes deben recibir cuidados paliativos.
La prevención y la detección a tiempo son fundamentales para detener el alarmante aumento de su incidencia. Más del 60 % de los casos se concentran en África, Asia, América Central y del Sur. Esas regiones registran el 70 % de las muertes a nivel global, principalmente por descubrirlos tardíamente y por la falta de acceso a tratamientos.
Prevención y detección a tiempo
La prevención y, sobre todo, la detección en estadio precoz de un tumor maligno aumentan la tasa de curación y la supervivencia de los pacientes hasta en un 90 por ciento. Las personas sanas pueden contribuir a su salud al corregir malos hábitos alimentarios, controlar el consumo de alcohol, eliminar el tabaquismo y realizar una actividad física de forma constante.
“Uno de los tipos de cáncer que es posible prevenir haciendo una dieta adecuada es el de colon, que en Sancti Spíritus, por ejemplo, está entre las tres primeras causas de muerte”, explicó el doctor Oscar Pérez Rodríguez, jefe del grupo provincial de Gastroenterología y de ese servicio en el Hospital Clínico Quirúrgico Camilo Cienfuegos, de la ciudad cabecera.
“Esta es una provincia con gran predominio de pobladores con más de 60 años, es la tercera de mayor envejecimiento del país, y esa afección tiene una alta incidencia, por eso la importancia de la detección precoz”, dijo.
Para conocer sobre la repercusión de esa enfermedad en el territorio, “los especialistas realizan un estudio que abarcará una década, y podrá definir preliminarmente los hábitos alimentarios que pueden estar influyendo en su proliferación”, comentó Oscar Pérez.
También asegura que en este tipo de enfermedad tiene mucho peso la genética, y hay enfermedades como el síndrome de Lynch o cáncer colorrectal hereditario no asociado a poliposis, para el cual se debe estudiar a la familia, porque hay evidencias en la literatura y el decursar del tiempo de que se presenta con más frecuencia.
“Por eso, el diagnóstico precoz mediante la colonoscopia, el test en sangre oculta en heces fecales (un proceder muy sencillo que se hace en los consultorios y policlínicos) es muy orientador”, afirmó.
El cáncer de colon tiene diferentes manifestaciones clínicas: aquellas que casi cursan asintomáticas porque no se les dan mucho valor, sobre todo al cambio del hábito intestinal en las personas de la tercera edad y pasan de la diarrea al estreñimiento.
“Igualmente están los que describen un cuadro dispéptico (dolor, náuseas, inflamación abdominal, eructos) y poco a poco han perdido peso; y quienes se presentan a la consulta con anemia avanzada. Todo está en dependencia del estadio clínico del paciente”, precisó el especialista.
“Y es posible prevenirlo con una dieta rica en fibras vegetales, evitar el uso exagerado de los condimentos secos en la alimentación y tomar abundante líquido; hay muchos riesgos porque sus causas son multifactoriales”, indicó.
Servicios renovados
Desde finales de julio del pasado año, los espirituanos que reciben los servicios de gastroenterología disponen de una instalación rejuvenecida donde se ha multiplicado el espacio y la comodidad tanto para la estancia como para las prestaciones.
“Haber creado un cuarto médico y un pantri con todos los recursos necesarios mejora la atención al trabajador, y tener los salones de espera y áreas de recuperación para los pacientes, mejoró bastante las condiciones del departamento. También contamos con un aula que aumentó la capacidad docente, pues en este lugar se forman todos los médicos residentes de la provincia y los de Ciego de Ávila”, explicó el doctor Oscar Pérez, el jefe de estos servicios.
“Ahora tenemos cuatro salones para procederes endoscópicos, se hacen del tracto digestivo superior, y se introducen nuevas técnicas quirúrgicas y diagnósticas como la esclerosis de várices, las ligaduras de várices y otros.
“Nos falta equipamiento para estar a la altura de instituciones del tercer nivel. Un sueño para los gastroenterólogos espirituanos y para el bien de la población sería volver a hacer la Cepre, o sea, la Colangiopancreatografía retrógrada endoscópica (diagnóstico y terapéutico del páncreas y la vía biliar, que combina la endoscopia con los rayos X), que se realizan actualmente en La Habana.
“Además lograr que Sancti Spíritus cuente con una torre de video endoscopía es positivo para la gastroenterología.
“Hemos evolucionado y queremos lograr más, tenemos personal entrenado y preparado y se ha multiplicado la cantidad de especialistas que trabajan aquí, de dos que había en la década de los 80 a 14 que somos en la actualidad. Nuestros pacientes merecen siempre una esmerada atención, concluyó el galeno”.
Síntomas del cáncer de colon
- Sangre en las heces: uno de los más frecuentes. Tras cierto tiempo de sangramiento, cuando la hemorragia no es detectada o no se acude al médico para su diagnóstico y tratamiento, aparece una anemia que puede producir sensación de falta de aire, cansancio, palpitaciones o mareo…
- Cambio en el ritmo de las deposiciones: diarrea o estreñimiento en personas con ritmo intestinal previo normal, aunque, lo frecuente es que se intercalen los dos períodos.
- Heces más estrechas: generalmente se produce porque el tumor está estrechando el intestino.
- Tenesmo o sensación de evacuación incompleta: aparece en tumores localizados en la parte más distal del colon.
- Dolor abdominal: suele ser un síntoma frecuente, aunque generalmente, se trata de un dolor inespecífico.
- Cansancio extremo o pérdida de peso sin causa aparente: ocurren con frecuencia en los tumores de colon avanzados.
Antecedentes aumentan riesgos
- Antecedentes familiares de cáncer de colon o de recto.
- Ciertas afecciones hereditarias, como la poliposis adenomatosa y sin poliposis.
- Antecedentes de colitis ulcerosa (úlceras en el revestimiento del colon) o enfermedad de Crohn.
- Antecedentes personales de cáncer de colon, recto, ovario, endometrio o mama. Y de pólipos (áreas pequeñas de tejido abultado) en el colon o el recto.
