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Por Joel García y Rudens Tembrás Arcia
Desde el mismo triunfo revolucionario de 1959, cuando aún calentaba el brazo, el Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz empezó a lanzar strikes en favor del movimiento deportivo cubano. Rectas durísimas, durante casi seis décadas, asombraron al mundo e hicieron posible que nuestro pueblo disfrutara de infinitas victorias. Y aunque Fidel seguirá sobre el montículo, sirvan unos pocos lanzamientos para homenajear al pítcher más extraclase, al deportista entero…
23/2/1961: La luz del Inder. Amparado por la Ley 936 nació la institución encargada de regir la vida deportiva del país: “En el campo no hay deportes de ninguna clase: ahora se ha creado el Inder para fomentar el deporte”.
19/11/1961: Plenaria de los Consejos Voluntarios del INDER: Pronunció un discurso programático sobre el papel de la educación física y el deporte: “Sin Revolución no se habría podido soñar siquiera con desarrollar en nuestra patria un gran movimiento deportivo”. A partir de 1985 se celebra en esa fecha el Día de la Cultura Física y el Deporte:
14/1/1962: I Serie Nacional de Béisbol. “El entusiasmo del pueblo cubano por la pelota, se palpa hoy en este parque (Latinoamericano), que será a partir de ahora escenario de grandes batallas entre nuestros mejores atletas aficionados”.
22/8/1963: I Juegos Escolares Nacionales. “De entre ustedes saldrán el día de mañana campeones que defenderán con orgullo la bandera de la patria revolucionaria”.
29/6/1966: Epopeya del Cerro Pelado. Al recibir a la delegación expresó: “Cómo fueron capaces de reaccionar nuestros atletas, con qué dignidad, con qué valor, defendiendo el deporte, defendiendo el derecho y defendiendo algo que hay que defender, que es la bandera de la patria”.
25/10 al 20/11 de 1966: XVII Olimpiada Mundial de Ajedrez. Presidió el Comité del Honor, jugó la primera partida y participó en la simultánea gigante que dio cierre a una cita que implantó récord de países participantes con 52.
28/2 al 14/3 de 1970: Victoria en Centrocaribes de Panamá. Aquel triunfo inició una seguidilla que se prolonga hasta la actualidad. En la bienvenida a la comitiva afirmó: “Nunca jugaron nuestros atletas con tanto valor, con tanto brío, nunca se arriesgaron como se arriesgan ellos, porque defienden algo que vale mucho más que el dinero, que es el honor, su prestigio, su reputación”.
30/7 al 13/8 de 1971: La potencia se asomó en Cali. El segundo lugar en los Juegos Panamericanos confirmó el camino de luz que abría la Revolución: “No sólo por los éxitos deportivos, sino por esa conducta patriótica, valerosa, firme, que mantienen nuestras delegaciones deportivas, nuestro pueblo se siente orgulloso”.
1971 y 1973: Mundiales de Béisbol. La ampliación del Latinoamericano para la cita de 1971 y la presencia en los partidos hasta la conquista de los títulos fueron sus jonrones en aquellos certámenes.
14-30/ 8/ 1974: Alegrías junto al ring. Participó en las jornadas del I Campeonato Mundial de Boxeo, en La Habana. Al consumarse la victoria de Cuba señaló: “Con el tesón, la disciplina, el entusiasmo y la dedicación mantenida por ustedes en estos años, estamos seguros que el deporte seguirá avanzando exitosamente”.
15/10/1976: Adiós a los Mártires de Barbados. “Nuestros atletas, sacrificados en la flor de su vida y de sus facultades, serán campeones eternos en nuestros corazones, sus medallas de oro no yacerán en el fondo del océano, se levantan ya como soles sin manchas y como símbolos en el firmamento de Cuba”.
1977: ¡Las primeras Eide! “Regla de oro: el atleta tiene que ser buen estudiante y promover el curso. Debe desarrollar sus aptitudes deportivas y físicas al máximo. La selección debe ser continua”.
7-18/11/1982: Juegos Centrocaribes de La Habana. Inauguró en el estadio Pedro Marrero la primera cita multideportiva organizada tras el triunfo de la Revolución. Visitó instalaciones, festejó victorias, premió a los campeones y clausuró el evento.
28/7 al 12/8 de 1984: Una decisión moral. Cuba faltó a los juegos olímpicos junto a varios países socialistas: “Sería ridículo decir que por cuestiones de seguridad no fuimos a Los Ángeles: fue estrictamente por razones de solidaridad”.
22/9/1988: Otra vez, principios sobre medallas. En medio de los Juegos Olímpicos de Seúl, a los que Cuba no asistió por cuestión de principios, entregó la Medalla del Honor Deportivo a 173 atletas: “Ustedes son ejemplos para nuestros pioneros, para nuestros adolescentes, para nuestros jóvenes y serán ejemplo para las futuras generaciones”.
2-18/8/1991: XI Juegos Panamericanos de La Habana. Fue protagonista de la obtención de la sede del evento, y máximo inspirador de una victoria histórica, en la que Cuba pasó por vez primera sobre la delegación de Estados Unidos.
25/7 al 9/8 de 1992: La cima olímpica de Barcelona. En el recibimiento de los deportistas cubanos, protagonistas de aquel inigualable quinto lugar, sostuvo: “Rindo tributo a esa virtud, a esa cualidad, a esa vergüenza de nuestros atletas”.
19/1/1995: Reconocimiento merecido. Recibió de manos de Mario Vázquez Raña el Premio al Mérito, otorgado por la Asociación de Comités Olímpicos Nacionales (Acno).
13/9/1995: Abrazo con la Quirot. Al entregarle la Orden al Mérito Deportivo dijo: “No me viene a la mente ningún otro ejemplo igual a la decisión, la voluntad y la consagración de Ana Fidelia de regresar a las pistas y volver a obtener los laureles que obtuvo”.
28/3 y 3/5 de 1999: Tope contra Orioles de Baltimore. Tras dividir honores, recibió al equipo cubano en la Universidad de La Habana: “Allí se produjo una competencia entre dos concepciones: nuestro concepto del deporte y el concepto del deporte profesional”.
13/8/1999: Sede de unos Juegos Olímpicos. “Nuestra limpia historia, nuestros extraordinarios éxitos en el desarrollo del deporte, nuestra cooperación con el Tercer Mundo, hacen a Cuba y a su pueblo acreedores de ese derecho”.
15-29/8/1999: La batalla de Houston. Cuando la mafia se apoderó del Campeonato Mundial de Boxeo y privó a Cuba de varios éxitos, ordenó la retirada de aquel espurio evento, encabezó una denuncia internacional y prometió que en el futuro tendríamos más boxeo.
2-3/9/1999: Batalla por la dignidad. Mostró los resultados de una investigación en que se evidenciaba la inocencia de los casos positivos cubanos dados a conocer en los Juegos Panamericanos de Winnipeg: tres pesistas y el saltador de altura Javier Sotomayor.
13/2/2001: Laboratorio Antidoping de La Habana. Al anunciar su construcción, dos años antes, sostuvo: “Cuba procederá de inmediato a crear un laboratorio para apoyar el deporte y defender a nuestro país de cualquier trampa, de cualquier suciedad, de cualquier bajeza que nos puedan hacer en unas competencias cada vez más comercializadas”.
23/2/2001: Escuela Internacional de Educación Física y Deportes. “Más que un centro de estudios, este es un punto de apoyo al desarrollo del deporte en los países del Tercer Mundo y principalmente en los países de América Latina y el Caribe”.
2/3/2001: Un día especial. Presidió la Gala de homenaje a los 100 mejores deportistas cubanos del siglo XX, y del retiro de Mireya Luis, Ana Fidelia Quirot y Félix Savón.
26/11 al 8/12 del 2002: Olimpiada Nacional del Deporte Cubano. Como alternativa a la inasistencia a los Juegos Centrocaribes de San Salvador, ideó este evento que tuvo entre sus actividades una Simultanea Gigante de Ajedrez. Al clausurarla dijo: “Todos hemos salido campeones en esta nueva, colosal y hermosa batalla en que nos enfrascamos; la victoria, una vez más, corresponde al pueblo”.
17/6/2005: Juegos Deportivos del Alba. Nacieron al calor de las relaciones entre Cuba y Venezuela, y del surgimiento del Alba: “Estamos hoy haciendo realidad el sueño de la amistad, la cooperación y la integración solidaria entre los pueblos hermanos de América Latina y el Caribe en el terreno del deporte”.
21/3/2006: I Clásico Mundial de Béisbol. “No íbamos a medir el esfuerzo de ustedes por si se ganaba o perdía el último juego (…) Ustedes siempre vinieron de abajo hacia arriba. Ustedes se habían ganado la medalla de oro mucho antes de ese último partido”.
24/8/2008: Para el honor, medalla de oro. En una de sus Reflexiones abordó la actuación cubana en los Juegos Olímpicos de Beijing: “El hecho de que participen más naciones y las competencias sean más duras es en parte una victoria del ejemplo de Cuba. Pero nos hemos dormido sobre los laureles. Seamos honestos y reconozcámoslo todos”.
