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Muchas expectativas despertó en el colectivo de trabajadores del establecimiento de productos lácteos de Baracoa, en Guantánamo, la aplicación del nuevo sistema de estimulación salarial. Pero luego del primer pago lo que abundan son las preocupaciones.
Es lo que emana de la carta vía digital que llegó hace pocos días a Buzón abierto, a través del correo electrónico andro@lacteobc.c.oc.4
De las pocas opciones a su disposición se acogieron al pago por rendimiento, sabiendo que una limitación para esta industria es que no se permite sobrepasar los planes, recoge el texto. Evidentemente recelosos, en la discusión donde aprobarían la forma de pago preguntaron algunas variantes a la “compañera de Recursos Humanos de la provincia”: que si cumplían y la empresa no, si les descontaban los porcentajes del salario por ese motivo, y les dijeron que no, que solo se deducía a los incumplidores.
Indagaron que si ellos alcanzaban lo previsto y ayudaban al resto de las unidades, de las utilidades formadas por los cumplidores saldría la estimulación para quienes lograran sus metas, y la respuesta fue afirmativa.
Sin embargo, en julio les esperaba una desagradable sorpresa. El establecimiento de productos lácteos de Baracoa consiguió lo proyectado y contribuyó a que la entidad también lo obtuviera e incluso fuera saldando sus atrasos, aunque la medida resultó pagar estimulación a todos, con la justificación de que pertenecían a una misma entidad. Por ese motivo, el extra que cobraron quienes nos escriben ascendió como promedio a 33 pesos.
Ahora esperan disgustados, porque esa situación tiende a repetirse, finaliza esta breve y muy importante misiva, pues de haber ocurrido las cosas tal cual las cuentan, una mala decisión mantiene descontentos y desorientados a un grupo de trabajadores. Además, el resultado es el efecto contrario a lo que persiguen la Resolución 17 y el paquete de normas jurídicas aprobadas, a fin de continuar dotando a las entidades de mayor independencia y autonomía en su gestión y fomentar el desarrollo de las fuerzas productivas.
Profesionalidad en la respuesta
El cardenense Jorge Rodríguez Muñoz escribió hace tres semanas a esta sección planteando una situación que le ocurrió en trámites con la agencia empleadora de Gaviota Varadero. ¿Cómo puede un universitario acabado de salir de las aulas acceder al sector turístico? ¿Dónde lograr la experiencia laboral que se necesita? Estas eran algunas de las interrogantes en su mensaje recibido vía correo electrónico.
La presteza en nuestra gestión fue igualada en la respuesta que recibió de la entidad este joven recién graduado de Lenguas Extranjeras. Agradecido nos remitió unas líneas para ponderar, entre otras, la contesta de Ela Cristina Ríos Valdivia, directora de la oficina de empleo de dicha sucursal.
“La compañera contactó personalmente conmigo de una forma muy atenta, para proceder con mi problema y responder a todas mis inquietudes. Gracias a su profesionalidad e interés todo fue solucionado de forma satisfactoria”, afirma el remitente.
En su correo manifiesta que le gustaría hiciéramos llegar la gratitud a quienes intervinieron en la diligencia de su caso y especialmente a la compañera Ela, a quien conoció durante la entrevista para la cual lo citaron. “Es increíble la imagen positiva que dejó en mí en los minutos que duró el encuentro. Si todos los jefes de cada organismo atienden a las inquietudes y se entrevistan con la población como lo hace ella, no creo que haya nada más que pedir”, reconoce Jorge Rodríguez.
Ojalá al menos la mitad de las cartas que gestionamos tuvieran una Ela de por medio para dejar tan buena impresión en quien se queja. Si la respuesta es positiva siempre será mucho mejor. Pero, ¡cuánto se agradecen los argumentos bien fundamentados y si es necesario una sonrisa y hasta un apretón de manos!
