Cuba: la joya del G8

Osleni Guerrero, mejor badmintonista latinoamericano del momento, tendrá su segundo desafío del año a partir del 9 de abril cuando inicie el XIX Internacional de Perú 2014, evento con nivel de International Challenge y que sumará 4 mil puntos a los ganadores de cada prueba.

Guerrero viaja al país andino como parte del grupo de ocho jugadores dirigidos por el español Arturo Ruiz, quienes fueron seleccionados por la Confederación Panamericana atendiendo a sus resultados y perspectivas inmediatas.

Este proyecto con ocho atletas —cuatro hombres y cuatro mujeres— surgió en noviembre pasado, cuando tuvieron 15 días de entrenamiento. Tiempo al cual se unirán otros diez días en tierras peruanas, para evaluar progresos y seguir trabajando.

El propio Ruiz reconoció en Osleni la gran figura de la comitiva, con el talento y la calidad para mantenerse entre el 30 y el 50 del mundo, “aunque para ello necesita un apoyo profesional serio capaz de explotar su físico y la técnica que posee”.

Según explicó Ruiz, la idea con el G8 es “hacerles mejorar su nivel, dándoles una formación técnica durante varios entrenamientos a lo largo del año, y brindándoles soporte en las competiciones internacionales”.

Para tal empresa, y a pesar de que en el continente existe ya un circuito creado, Ruiz aseguró que este no brinda a Guerrero los puntos necesarios, pues el cubano precisa acceder a eventos de Grand Prix, “lo cual supone competir en certámenes en Europa, Asia y Estados Unidos; para lo cual será necesario concebir una planificación de torneos entre la Confederación Panamericana y las Federaciones Nacionales”.

Para el resto de los integrantes del grupo existe también una planificación personalizada, “pues las realidades y necesidades de cada uno de ellos varía”, constató el entrenador.

Una vez en Perú, Ruiz se hará cargo de sus discípulos y “luego daremos un asesoramiento de las competiciones que cada uno de ellos debe jugar para cumplir los planes.
Con Osleni el objetivo es el Campeonato del Mundo en agosto, allí tiene opciones con muchos de los badmintonistas que asistirán. Ya jugó un mundial y este segundo debe servirle de preparación para dar un salto de calidad en busca de una buena actuación en la cita del próximo año, la cual será de puntuación olímpica”.

Para Osleni, la posibilidad formar parte de este grupo se traduce en competiciones internacionales, apoyo técnico y asesoramiento, tres renglones esenciales para ascender en su carrera deportiva y situarse en planos estelares del bádminton mundial. Sitio al cual puede aspirar, por méritos propios, la actual joya del G8.