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Con 155 zonas de bajo voltaje eliminadas el pasado año y otras acciones implementadas para reducir molestias a la población como antecedente, la Empresa Eléctrica espirituana emprende nuevos rumbos en este 2014; respaldada por más de 21 millones de pesos para optimizar la calidad de sus servicios.
El descenso de los niveles de accidentalidad, la no ocurrencia de contingencias mortales desde el 2009 y la disminución del tiempo y frecuencia de las interrupciones constituyeron elementos válidos para inscribir a los trabajadores eléctricos entre los mejores de su sector en el país.
Según declaraciones a los medios de Boris Meneses Acosta, director técnico de la mencionada entidad: “Alrededor de 500 acciones fueron ejecutadas para reducir las pérdidas, reforzar la seguridad al sistema y contrarrestar las complejidades provocadas por el deterioro de las viejas redes”. Además, laboraron para incrementar gradualmente las cargas ya instaladas.
El funcionario añadió también que entre las obras materializadas durante el 2013 estuvieron la electrificación de domicilios, la supresión de tendederas en asentamientos remotos y la realización de trabajos a terceras entidades como Azcuba y el Minagri. Para el año en curso se proyecta la edificación de dos parques fotovoltaicos y el montaje de ocho motores en la planta de fuel oil de Cabaiguán; dos grandes inversiones para consolidar a un sistema cuyos desperfectos se traducen, ya con ínfima frecuencia, en molestias y oscuridad.
