2013: Año de pérdidas y de esperanzas para el cine cubano

2013: Año de pérdidas y de esperanzas para el cine cubano

1 Estrella2 Estrellas3 Estrellas4 Estrellas5 Estrellas (Sin valoración)
Cargando...

Alfredo_Guevara-600x270

por Pedro R. Noa Romero

El 2013 va quedando atrás. Cuando miramos cómo ha transcurrido este año dentro de la industria fílmica cubana, nos damos cuenta que ha sido un período marcado por la desaparición física de un grupo importante de figuras cimeras dentro de su historia y desarrollo. Pero, al mismo tiempo, ha constituido una etapa colmada de expectativas, sobre todo, desde la creación y funcionamiento del Grupo Permanente de trabajo de los cineastas cubanos para el rediseño del sistema del cine y el audiovisual nacional.

El resumen que pretendo hacer sobre lo acontecido durante el ciclo anual culminante, no solo tratará sobre los que ya no están y de lo que se está haciendo para reverdecer los laureles de la filmografía nacional, sino también se aproximará al estado de la producción, la cual, por cierto, no ha sido notable en largometrajes. Además, comentaremos los principales acontecimientos y eventos fílmicos de la Isla.

Un aplauso para la memoria de los que ya no están entre nosotros

No cabe duda que una de las pérdidas más lamentables y relevantes en este año fue la de Alfredo Guevara, fundador y Presidente del ICAIC, así como del Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano, durante muchos años.

Su ausencia física puso fin a la creatividad —no así al legado— de uno de los pensamientos más lúcidos de la segunda mitad del siglo pasado, comprometido cien por ciento con el cine de nuestra área geo-política y con los destinos socio-políticos de Cuba.

Otra figura que nos abandonó fue Walfredo Piñera, un nombre cimero en la crítica y la enseñanza cinematográfica en Cuba desde la década del ’50. Piñera amó el séptimo arte desde su infancia y dedicó su vida casi completamente a él. Su obra crítica, su labor como promotor, su pasión por compartir su prodigiosa memoria y sus amplios conocimientos cinematográficos con todo aquel que se le acercara, se fundió armoniosamente con su fe cristiana. A la relación y utilidad del cine con y para la Iglesia católica, dedicó una buena parte de sus energías.

Pablo Ramos o simplemente “Pablito” —como lo conocimos todos los que nos acercamos a su persona y/o a su obra—, es otra de las personalidades fallecidas durante el primer semestre de 2013. El Universo Audiovisual del Niño Latinoamericano, hoy convertida en la Red Continental UNIAL (Universo Audiovisual de la Niñez Latinoamericana y Caribeña) fue su obra de vida desde los pasados ochenta del siglo XX. El Universo fue un sueño construido por él con persistencia y amor, para beneficio de todos aquellos que deben mirar el futuro a través de los medios.

El realizador Daniel Díaz-Torres feneció cuando todavía su filme La película de Ana (1) giraba por varios festivales del mundo obteniendo buenas opiniones del público y la prensa. Daniel perteneció a una generación de cineastas forjada, primero, dentro de la crítica, y llevada después de la mano, por el ICAIC, a través de la realización de documentales y como asistentes de dirección, hasta realizar su primer largometraje que, en su caso particular fue Jíbaro (1984), un filme basado, precisamente, en el documental homónimo, realizado por él, dos años antes.

Díaz Torres también dirigió, junto a Santiago Álvarez, varias emisiones del Noticiero ICAIC Latinoamericano durante la década del ochenta. En su filmografía se destacan la polémica Alicia en el pueblo de Maravillas (1990), Kleines Tropikana (1997), Camino al edén (2006) y Lisanka (2009).

Tulio Raggi ha dejado huérfanos a un buen grupo de personajes animados nacionales. Sus creaciones más reconocidas fueron el Capitán Tareco y el Negrito Cimarrón, aunque muchas generaciones se han deleitado con las vicisitudes del padre que se queda por primera vez frente a las labores domésticas en El primer paso de papá (1977); o con Amigos (1978), en el cual una abejita atrapada en una telaraña es rescatada por unos elefantes; y hasta se han enfurecido con la maldad del zángano expulsado de la colmena por vago, que vuelca su ira contra una preciosa e inocente rosa, argumento de El zángano y la rosa (1980).

Sin embargo, desde mi punto de vista, su obra más lograda fue El alma trémula y sola (1983), una interpretación del poema La bailarina española de José Martí, desde el cual logró acercarnos al Apóstol como ese hombre solitario, comprometido con una causa e impresionado ante el arte y la belleza de la Bella Otero, un día de su triste estancia en el inhóspito Nueva York del siglo XIX. Tulio Raggi, en solo 7 minutos, apoyado en un dibujo altamente expresivo, consiguió, a través de El alma trémula y sola, ponernos dentro del ser humano creador de aquellos versos tan sentidos e íntimos.

Con la desaparición física de Camilo Vives se cierra la historia de una de las más importantes personalidades de la producción dentro del ICAIC. Su obra —en esta profesión tan importante dentro de la industria cinematográfica—, va desde clásicos como Lucía(1968. Humberto Solás) hasta El Benny (2006. Jorge Luis Sánchez).

Entre otros muchos reconocimientos por su trabajo, Camilo Vives fue elegido Presidente de la Federación Iberoamericana de Productores Cinematográficos y Audiovisuales (FIPCA) en 2001.

El importante director de cine español Manuel Gutiérrez Aragón, escribió recientemente en la revista Nuevo cine latinoamericanosobre su obra:

Camilo pertenecía a la escuela clásica de los hombres de cine que hacían mucho más que la función que figuraba en los títulos de crédito de las películas. La creación de equipos coherentes es un ejemplo y cada película necesita el suyo. Camilo superaba ese concepto que llamamos profesional, porque para ayudar a la creación ajena es necesario no solo tener preparación, sino también generosidad.(2)

Bastaría el pequeño papel de la madre de Lucía, en el segundo episodio del filme homónimo de Humberto Solás, para recordar por siempre a María Elena Molinet. Sin embargo, esta mujer, que hasta casi los últimos días de su vida se dedicó a la docencia y a la proyección de vestuarios para las más diversas puestas en escena del cine y el teatro cubanos, quedará en la memoria artística de su país como una de las diseñadoras que contribuyó a definir la imagen de la cinematografía cubana, a través de las creaciones de directores como el propio Humberto Solás, Enrique Pineda Barnet, Manuel Octavio Gómez o José Massip, por solo citar unos cuantos.

La extensa labor creadora de Molinet fue reconocida a través de los Premios Nacionales de Diseño, Enseñanza Artística y Teatro.

El arquitecto Oscar Ruíz de la Tejera es quizás la figura menos pública de los que ya no van a estar físicamente entre nosotros. Sin embargo, su labor relacionada con la industria fílmica no fue menos importante.

Se vinculó al ICAIC desde 1961 como dibujante del departamento de arquitectura y llegó a ser el artífice de un buen número de salas de cine a lo largo de nuestro territorio, en aquellos años cuando el país dedicó recursos materiales para la construcción de estos espacios en diferentes localidades.

En su obra como arquitecto se destacan el remodelamiento de la escuela en el campo convertida en la funcional Escuela Internacional de Cine y Televisión de San Antonio de los Baños (EICTV), así como la reconstrucción de la casa donde radica la Fundación del Nuevo Cine Latinoamericano. Al morir, ostentaba la distinción por la Cultura Nacional.

Más cortometrajes, documentales y animados que largometrajes

Desde hace muchos años, el Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano (FNCL), celebrado en La Habana durante los primeros días de diciembre, ha funcionado como un medidor del comportamiento de la producción fílmica en nuestro país, tanto en calidad como cantidad. En especial, por el número de obras nacionales en las Secciones Oficiales en competencia.

Si revisamos la participación cubana en las ediciones anteriores, comprobaremos que, por lo general, la cifra de documentales, cortos de ficción y animados que pugna por los Corales, no es mayor a la de largometrajes. En el 2013 fue todo lo contrario.

jirafas-kike-alvarez-620x270

Si el 2012 fue un período fructífero en la realización y estreno de largometrajes de ficción (3), en el año que termina solo se estrenaron cuatro, en los que incluyo Bocaccerias habaneras(Arturo Sotto) y Jirafas (Enrique Álvarez), exhibidas por primera vez durante el Festival y que deben pasar todavía por las salas de cine del país durante el 2014, por lo cual podré comentarlas con más detenimiento.

Esta parquedad en la producción de largometrajes de ficción se sintió en el Festival con la ausencia de obras en el acápite de Óperas primas.

Mientras, fuera de concurso, era mostrada Esther en alguna parte (Gerardo Chijona), una película que reflexiona sobre la soledad acompañada. Esa paradoja que viven muchas personas, quienes unas veces desandan sus años de vida sin conocer verdaderamente a las personas que tienen a su lado.

esther en alguna parte fotograma

Con una estructura sencilla (no simple), sin dejar cabos sueltos, la historia de Esther en alguna parte transcurre de forma lineal, amena, con solo algunos flashbacks que van completando, en el nivel del relato, la verdadera historia de Maruja Sánchez, la esposa/cantante (Daisy Granados), desde los recuerdos de aquellas personas visitadas por Lino, su esposo (Reinaldo Miravalles) (4) y Larry Po (Enrique Molina), ruta que los (nos) lleva a encontrar a Esther.

Completa la lista de filmes de ficción de 2013, Si vas a comer, espera por Virgilio, adaptación de la obra teatral de igual nombre, escrita por el dramaturgo José Milián, a través de la cual su director, Tomás Piard, continúa el trabajo muy personal que viene haciendo en la adecuación de algunas puestas en escena importantes al lenguaje audiovisual. Esta cinta no estuvo presente en el Festival de La Habana.

Sin embargo, la producción de cortometrajes y documentales ha continuado en ascenso numérico y cualitativo. De ello da fe la presencia de seis documentales y siete cortometrajes de ficción en la Sección Oficial de competencia.

No me detengo en el análisis de ninguna de las obras, porque las más significativas ya han sido comentadas en esta columna, debido a su participación en los diferentes eventos audiovisuales realizados durante el 2013. Entiéndase, el XIII Festival Internacional Santiago Álvarez in memoriam, realizado en Santiago de Cuba entre el 7 y el 12 de marzo; la XII Muestra Joven ICAIC, ocurrida del 2 al 7 de abril; y la V Muestra Itinerante del Caribe, realizada en La Habana del 12 hasta el 17 de junio, así como el propio Festival de Cine de La Habana, por solo citar los más significativos.

Otro género en aumento fue el de dibujos animados. Este año, Cuba presentó un total de cinco obras; pero lo más novedoso fue la presentación de Fernanda y el extraño caso del Dr. X y Mr. Jai (Mario Rivas), pues desde hacía varios años no se estrenaba ni participaba en el Festival un largometraje de animación nacional, aunque debo señalar que el resultado artístico del filme no es tan loable como el hecho de su presentación.

Fernanda y el extraño caso del Dr. X y Mr. Jai

Fernanda y el extraño caso… es la demostración de que no es igual crear cortos que hacer un largo, pues no cabe duda que el personaje ha funcionado muy bien en la casi veintena de cintas breves en las que ha aparecido, pero en esta primera incursión más extensa, la historia se hace por momentos monótona.

Fernanda también tiene en contra —desde mi punto de vista— la no definición de un público etario, es decir, no se sabe si está dirigida al infantil o a los adultos, dicha contradicción se hace sentir, por ejemplo, en la gran cantidad de citas intertextuales empleadas desde el propio título (5) y durante muchos parlamentos que hacen, constantemente, que los personajes tengan que explicar a quién o a qué texto se están refiriendo. A lo anterior se une, como colofón, un débil doblaje de voces en los personajes que resiente la actuación de los dibujos.

En un segundo trabajo resumimos los premios ganados por el cine cubano durante el 2013, otros acontecimientos ocurridos en este período, y los esfuerzos que se han venido haciendo para reformular el mapa audiovisual nacional en un futuro próximo.

Premios para el cine cubano en Festivales internacionales

Este año culmina con una cosecha significativa de lauros para la filmografía nacional y sus directores, en diferentes Festivales alrededor del Mundo.

juan-de-los-muertos_1

En primer lugar, el Premio Goya de la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas de España a Juan de los muertos (2011. Alejandro Brugués) como mejor película iberoamericana, recibido en febrero, en el Centro de Congresos Príncipe Felipe, Madrid.

También, a inicios de año, se conoció de la participación del film La piscina (2011. Carlos M. Quintela) en la sección “Panorama especial”, sección paralela oficial del prestigioso Festival de Cine de Berlín.

Otro galardón importante fue recibido por el director y actor Jorge Perugorría, quien recibió el Premio a la Gloria Artística 2013, en el 29 Festival Latino de Chicago, celebrado en abril.

Por su parte, Penumbras (2012, Charlie Medina) obtuvo siete premios, entre ellos el de mejor largometraje en el concurso internacional, durante la primera edición del Puerto Rico International Film Fest & Convention.

También en un festival del área caribeña, fue premiada Y sin embargo… (2012. Rudy Mora), la cual ganó el premio Margarita de Oro en el Festival Internacional de cine de Santo Domingo, República Dominicana.

De igual modo, se alzó con el Premio especial del Jurado en el 11no. Festival Latinoamericano de cine de Vancouver, Canadá, la cinta Melaza (2012. Carlos Lechuga).

El director Pavel Giroud obtuvo el premio al mejor proyecto en el II Foro de co-producción Europa- América Latina, durante el 61 Festival de Cine de San Sebastián, España, con El acompañante. Este galardón se concede a proyectos latinoamericanos aún no filmados y tiene una dotación de diez mil euros.

Oslo, el cortometraje dirigido por Luis Ernesto Doñas durante 2012, ganó el galardón al mejor cortometraje de ficción, en el Festival Internacional de cine en Viña del Mar, Chile.

Por último, y no menos importante, la cinta Verde verde (2011. Enrique Pineda Barnet) mereció los premios de mejor director, mejor actor y mejor diseño, en la Muestra Iberoamericana de Ceará, Brasil.

Otros acontecimientos importantes [6]

El 2013 fue marco para otros acontecimientos importantes vinculados con el desarrollo del cine cubano. Uno de los más significativos fue el nombramiento, en setiembre, de Roberto Smith de Castro como nuevo Presidente del Instituto Cubano de Arte e Industria Cinematográficos (ICAIC). Graduado de Psicología en la Universidad de La Habana, Smith ha desarrollado una carrera como funcionario dentro del Instituto que lo ha llevado de subdirector de la Distribuidora Nacional de Películas a Vicepresidente del organismo.

Otro nombramiento importante lo constituyó el de Iván Giroud como director general del Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano. Giroud había sido director del evento desde 1994 hasta 2010, así como director para América del Diccionario iberoamericano de cine, uno de los proyectos más importantes de su tipo. Entre 2009 y el 2014, se desempeñó como asesor de la presidencia del ICAIC, entre otras responsabilidades.

Durante todo el año, ocurrió el proceso de digitalización de los Noticiero ICAIC Latinoamericano, gracias a un convenio entre el ICAIC y el Instituto Nacional del Audiovisual (INA) de Francia. Los excelentes resultados de esta tarea pudieron ser apreciados durante las exhibiciones que se hicieron en el cine La Rampa, en el marco del Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano.

noticiero-icaic

Para que se tenga una mejor idea de la importancia de este suceso, debo agregar que el Noticiero ICAIC Latinoamericano, bajo la dirección de Santiago Álvarez, comenzó a realizarse en 1960 y se mantuvo, con una frecuencia semanal, hasta 1990. Sus tres décadas de existencia lo convirtieron en un cronista sin igual de una buena parte del acontecer en Cuba, América Latina y de casi todo el Tercer Mundo. Por tal motivo, fue declarado Memoria del Mundo por la UNESCO en 2009.

Y precisamente, relacionado con la figura de Santiago Álvarez, quedó constituida en la Universidad de La Habana, la Cátedra Honorífica de Periodismo cinematográfico, que lleva su nombre, la cual funciona adscripta al Departamento de Periodismo de la Facultad de Comunicación Social de ese centro universitario y a la Oficina Santiago Álvarez del ICAIC.

Otro hecho importante fue la realización de la II Semana de la Crítica Cinematográfica, organizada por la Asociación cubana de la prensa cinematográfica (ACPC), celebrada en el Pabellón Cuba, a principios de año.  En esta convocatoria se debatieron temas como el estado actual del audiovisual en Cuba, los procesos de creación y recepción del documental, la animación contemporánea, así como la proliferación de contenidos y las nuevas formas de consumo audiovisual en el presente.

También funcionó el XIX Taller Nacional de la Crítica en Camagüey, otro espacio importante para el análisis teórico del cine nacional. En esta ocasión, el Taller estuvo dedicado a la crítica cinematográfica, la cual fue vista desde la perspectiva de los más jóvenes y en su relación con la enseñanza académica y con la ética.

Cuban-Women-filmmakersPor primera vez se efectuó la Muestra Internacional de Mujeres Realizadoras Cubanas, que recorrió varias ciudades norteamericanas durante el mes de marzo. Ella fue espacio propicio para la exhibición de más de 30 obras, pertenecientes a 26 directoras. La Muestra fue auspiciada por el Comité Internacional de Mujeres en el Cine, la Mediateca de Cineastas cubanas, el ICAIC y la Cinemateca de los Estados Unidos de América, en colaboración con la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas de ese país.

De igual forma, se debe destacar la labor de Ediciones ICAIC, que logró terminar alrededor de una decena de títulos, además de mantener la revista Cine cubano con una frecuencia trimestral. En el 2013, esta editora ganó el Premio de la Crítica por el texto Sexo de cine, escrito por el narrador y ensayista Alberto Garrandés.

Cierro los sucesos más importantes de este periodo anual, con la inauguración de la sala de proyecciones Walfredo Piñera, el pasado 26 de diciembre. Esta confortable sala se encuentra ubicada en el centro Cultural Padre Félix Varela, sito en la Calle Tacón entre Chacón y Mercaderes, Habana Vieja, antigua sede del Seminario San Carlos y San Ambrosio. Dicho local brindó sus primeras funciones durante el pasado FNCL.

Reverdecer los laureles del audiovisual cubano

Sin embargo, desde mi punto de vista, lo más trascendental que ha estado ocurriendo en el periodo que finaliza, ha sido el proceso de transformación que se ha venido preparando dentro de la industria fílmica nacional con vistas a un futuro próximo.

Los cambios que se avecinan han estado vinculados a dos líneas fundamentales desarrolladas durante todo el 2013. La primera ha estado relacionada con la Comisión Permanente para la implementación y desarrollo de los Lineamientos Económicos y Sociales del Partido y la Revolución, surgida a partir del VI Congreso del Partido Comunista de Cuba. Comisión que ha sometido al ICAIC a un proceso de diagnóstico y reestructuración de su labor, con el objetivo de adaptar al Instituto al nuevo contexto en que se desenvuelve el país.

En tal sentido, se han desarrollado, a lo largo del año, varias asambleas por departamentos y áreas de trabajo, para discutir con los trabajadores, artistas y técnicos, los cambios estructurales y funcionales que deben ocurrir próximamente en la Institución.

La otra línea se vincula con la creación y puesta en marcha del Grupo de Trabajo permanente, formado por creadores cinematográficos, que agrupa no solo a directores, sino también a diferentes representantes técnicos- artísticos de la industria audiovisual nacional, pertenecientes a todas las generaciones [7].

Su creación se produjo después de una reunión efectuada el 4 de mayo en el Centro Cultural Fresa y Chocolate, desde la cual quedó definida, como objetivos esenciales del Grupo, la representación de los cineastas en todas las instancias y eventos, garantizar la participación activa de los mismos en todas las decisiones y proyectos que se relacionen con el cine cubano, y luchar por la protección y desarrollo de estas artes e industrias, así como de sus hacedores.

Los integrantes de este colectivo saben que se enfrentan a un conjunto importante de problemas acumulados durante varios años dentro de la industria, unidos a nuevas figuras dentro del panorama fílmico cubano, como el productor independiente, poseedor de la tecnología necesaria para elaborar una película, cuyos fondos ha gestionado por su cuenta, sin apoyo estatal, a través de las más disímiles maneras, incluida la búsqueda de financiación por medio de sitios en Internet.

También conocen la desastrosa situación material y mala utilización de las salas de proyección en toda la nación, lo cual afecta el contacto de sus obras con el público destinatario.

Son víctimas de la piratería autorizada, mutiladora del camino natural de la obra fílmica en su paso, primero, por las pantallas públicas y después por las privadas o domésticas, piratería destructora del deleite estético de las personas, por medio de copias de pésimo estado técnico, promotoras, muchas veces, de materiales de pésimo gusto.

Teniendo en cuenta lo anterior, el Grupo de Trabajo permanente se ha propuesto, como punto primario, la promulgación de una Ley de Cine, herramienta imprescindible para fundamentar el sistema audiovisual nacional. Esta legislación deberá estar acompañada del Decreto- Ley del Creador Cinematográfico y Audiovisual, así como del Registro del Creador y el de Productoras, los cuales contribuirán a crear un marco legal a la producción autónoma dentro del país.

También aspiran a la implementación de un Fondo de Fomento Cinematográfico, para el cual la calidad y factibilidad de los proyectos presentados deberán ser la premisa fundamental en el otorgamiento de ayuda técnica y financiamiento.

En toda esta redefinición del mapa audiovisual nacional, el ICAIC deberá jugar roles nuevos como un Instituto aligerado de responsabilidades. Sus responsabilidades deben centrarse en el cuidado del patrimonio tangible que le han legado más de cien años de cine cubano, y como promotor y velador de una política de creación audiovisual, en la que debe continuar primando lo estético por encima de lo economicista.

Con estas quimeras esperanzadoras, en las que están laborando muchos de nuestros más prestigiosos realizadores, quiero culminar este balance de un año que parece marcar el inicio de cambios cardinales en el universo audiovisual cubano.

 

NOTAS:

(1)   El filme alcanzó los Premios Corales de actuación femenina y guión —entre otros reconocimientos— en el 34 Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano, realizado en La Habana en diciembre de 2012, y fue considerado como el mejor largometraje de ficción en la selección anual de la Asociación Cubana de la Prensa Cinematográfica (ACPC). Sobre la cinta puede consultar en esta misma Columna: “La transparencia de Ana”, publicado el 22 de febrero de 2013.

(2)   Gutiérrez Aragón, Manuel: “Camilo Vives, un hombre de cine”, en: Nuevo cine latinoamericano. No. 15. Invierno 2013. p. 111.

(3)   Los largometrajes de ficción siempre sirven para medir la eficiencia de la industria audiovisual, debido a la cantidad de recursos y esfuerzos que hay que movilizar para terminarlos. En el 2012, esta producción alcanzó la cifra de 9 cintas terminadas durante el año. Al respecto, puede consultarse: “¿Qué sucedió en nuestras pantallas durante el 2012?”, publicado en esta Columna el 14 de febrero de 2013.

(4)   Este popular actor recibió un Premio Coral de Honor por su trayectoria artística, en la ceremonia de clausura del 35 Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano.

(5)   El título hace referencia a la novela El extraño caso del Dr Jekyll y Mr Hide (1886), escrita por Robert Louis Stevenson. La obra literaria ha sido versionada al cine en varias ocasiones, la más reconocida es la dirigida por Rouben Mamoulian en el año 1931, titulada Dr Jekill y Mr. Hide.

[6] Para la relación de galardones y los sucesos importantes de 2013, me he apoyado, principalmente, en la sección “Noticiero ICAIC”, a cargo de Joel del Río, incluida en las revistas Cine cubano  187, 188 y 189-90, correspondientes a este año.

[7] Sobre la creación y funcionamiento del Grupo Permanente de Trabajo de los cineastas, pueden consultarse los trabajos “Rescatando la confianza”, “Acta de nacimiento” y “¿Por qué se crea este grupo de trabajo?”, publicados en La Gacetade Cuba  No. 4, julio- agosto de 2013.

(Tomado de Cubarte)

Compartir...

Escribir comentario

© 2018 Trabajadores. Órgano de la Central de Trabajadores de Cuba
Director: Alberto Núñez Betancourt
Subdirectores Editoriales: Alina Martínez Triay y Joel García León
Territorial y General Suárez. Plaza de la Revolución. La Habana, Cuba. CP: 10698
Fax: 053 (7) 555927 E-mail: digital@trabajadores.cu