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Kenia, Tanzania, Uganda, Ruanda y Burundi forman el grupo de países que prefieren contar con una alternativa al dólar de Estados Unidos en el comercio regional. Los presidentes de estas cinco naciones han pactado crear una divisa común.
Dentro de los próximos 10 años armonizarán su política monetaria y fiscal, fundarán un Banco Central común y unirán las monedas existentes en una sola. La unidad monetaria permitirá ampliar considerablemente la cooperación de las cinco naciones, que actualmente se concreta ya en el desarrollo de un mercado común y una unión aduanera.
Con el plan recién firmado, los líderes de los cinco Estados africanos buscan prepararse mejor para la exploración conjunta de los recursos de hidrocarburos disponibles y desligar la región, en la que viven unos 135 millones de personas, de la ayuda de los organismos internacionales.
Con información de Russia Today
